Dirección de Carrera vuelve a liarla con la sanción a Joan Mir

Hacía tiempo que Dirección de Carrera no la liaba con una de sus inesperadas sanciones, pero ha vuelto a hacerlo. Al llegar al box del Leopard para celebrar con los miembros de su equipo la octava victoria de la temporada en Moto3, Joan Mir recibió la notificación de Dirección de Carrera para que pasara a visitarles al término de la prueba de Moto2 en Alcañiz. La razón estaba en la reclamación que habían puesto contra él, desde el equipo de Di Giannantonio, se supone, porque es el que más se quejó, por el zigzagueo que había hecho en la recta que da acceso a las dos curvas antes de meta. Le sancionaron por conducción irresponsable, una especie de cajón de sastre en el que entran cada día cosas nuevas, con seis posiciones en la parrilla de salida de Motegi. En realidad, es más feo el agravio de la sanción que el castigo real, porque Mir ya ha ganado este año en Argentina, por ejemplo, saliendo decimosexto, pero no le sentó bien, y con razón, porque en Moto3 se han visto cosas mucho peores sin consecuencia alguna.

A Mir le pidieron explicaciones al llegar a Dirección de Carrera, donde le esperaba Mike Webb y dos stewards más, y contó que en la vuelta anterior otros pilotos habían hecho lo mismo sin que pasara nada. Contó también que dudó si afrontar la curva por dentro o por fuera, y que quería hacer lo contrario que el primero de sus perseguidores para aguantar la posición de líder. Al final lo hizo por el exterior, sin poner en peligro a nadie. Ya que estaba ahí, Mir recordó que Di Giannantonio le había pasado, a cinco o seis vueltas del final, aprovechando su rebufo y que le cerró después, pero que él no iba a reclamar por eso. Y para rematar su defensa, echó la vista atrás, a las carreras de Mugello y Assen en las que él fue víctima de varios toques en la última vuelta que perjudicaron su carrera sin que pasara nada después.

Es el problema que suponen muchas veces las decisiones de Dirección de Carrera, que no hay un criterio fijo, un catálogo de acciones con sanciones. Y en el que se les pasó a los pilotos el pasado invierno estas eses no se incluían, porque son más que típicas, principalmente en Moto3. Al final, el líder de Moto3, que será campeón en Japón con otra victoria o un segundo puesto aunque ganase Fenati, se toma con resignación la sanción. Aunque no la comparte, sabe que ya puestos podría haber sido peor que esas seis posiciones en la próxima parrilla: “Me sorprende que a mí, que soy un piloto limpio, me vengan con estas cosas. Soy agresivo, pero limpio. No comparto la decisión, pero la respeto, porque sé que Dirección de Carrera tiene una labor difícil. Acepto la penalización y no me afectará para intentar salir a ganar el título en Japón”.