"Quizás este triunfo me dé más medios para luchar por ganar"
Logró el primer triunfo de una mujer en un mundial de velocidad (SSP 300): "Lo difícil no es encontrar sitio en la parrilla, sino encontrar apoyos y medios".
Con 20 años, Ana Carrasco ha entrado en los libros de historia del Motociclismo. Es la primera mujer que gana una carrera en un mundial de velocidad. Lo hizo el domingo en Portimao en Supersport 300, campeonato de motos derivadas de serie de esa cilindrada que acompaña al Mundial de Superbike.
¿Cómo va el día después?
El día después, una locura. Todo el mundo llamándome por teléfono, tengo el móvil que va a explotar. Estoy ahora mismo en Milán porque tengo una entrevista y en unas horas iré a Barcelona. Un no parar.
Serán muchos mensajes de felicitación. ¿Con cuál se queda?
Todos me han hecho ilusión, porque me ha escrito mucha gente. Pero los que más considero son los de los pilotos, me dejan un gran recuerdo.
Para los que no lo vieron, ¿cómo fue la carrera de Portimao?
Una carrera muy difícil, había muchos pilotos rápidos. Al principio sacamos una distancia con el grupo de detrás y nos quedamos tres pilotos. Después, a mitad de carrera, se unieron dos más y nos quedamos cinco. Mi estrategia, lo que intenté, era estar siempre en segunda posición. En la última vuelta ya me puse primera y tiré todo lo que pude para ganar la carrera.
En el momento de cruzar la línea de meta, ¿ya sabe que es la primera mujer que gana una carrera de un Mundial de velocidad de motociclismo?
No, no. En aquel momento no pensaba en eso. Estaba muy contenta, habíamos conseguido el resultado que llevábamos buscando tanto tiempo. Hemos trabajado mucho para estar ahí y estaba realmente contenta por mí, por todo el equipo y por toda la gente que me rodea.
Su temporada hasta entonces estaba siendo buena, con puntos y buenos resultados, pero aún sin entrar en el top cinco. Y de repente, una victoria. ¿Eso cómo se explica?
La explicación es fácil, en pretemporada teníamos mucho ritmo y creíamos que podíamos estar en estos puestos durante todo el año. Pero en las primeras carreras tampoco tuvimos mucha suerte y por unas cosas o por otras no llegaron los resultados. También Kawasaki había estado un pelín por debajo del resto de marcas y nos costaba mucho en las carreras aspirar a las posiciones de cabeza. Pero ahora sí que tenemos una moto bastante competitiva y eso me ha permitido poder luchar por esta victoria.
¿Cómo es esta categoría, el Mundial de Supersport 300, en comparación con otras como Moto3?
La organización en ambos casos es Dorna, así que es lo mismo. Y el campeonato está muy apretado, casi todas las marcas están al mismo nivel y hay muchos pilotos rápidos. Las carreras son siempre grupos muy largos y eso dificulta un poco luchar por el podio. Puedes estar muy cerca, pero como el grupo es largo cualquier error te puede dejar fuera.
Quedan dos carreras para que acabe la temporada. Llegó su primer triunfo... ¿y ahora qué?
Mi objetivo es ganar, soy sincera, intentar ganar las dos carreras que quedan. Si no lo conseguimos, estar en el podio ya sería un éxito.
¿Y cuál es su situación para el próximo año?
La idea es continuar con el mismo equipo y en el mismo campeonato para intentar ganar el título, es lo que tengo en la cabeza. No lo puedo confirmar al cien por cien, pero es la idea.
¿Es más difícil encontrar sitio en las parrillas por ser una mujer?
Lo difícil no es encontrar sitio, sino encontrar apoyo y medios. Estar en Moto3, pero con los medios que había tenido en los últimos años, tampoco era lo que quería. Si no tienes material competitivo no puedes aspirar a buenos resultados. Para todos los pilotos creo que es un poco difícil de asimilar. Ahora mismo quiero estar donde pueda tener material competitivo.
Y eso es posible en Supersport 300.
Ahora mismo sí, quizás con esta carrera la gente cambia de mentalidad y confía en que una mujer pueda ganar y eso me dé los medios para poder hacerlo. En Moto3 no los he tenido y hasta que no tenga una buena oferta u oportunidad que me permita estar delante, no creo que vuelva.