Ediciones
Resultados
Síguenos en
Hola

MOTOGP | GP DE ALEMANIA

Márquez: “Sueño con competir contra mi hermano en MotoGP”

El campeón ha hablado en Sachsenring de sus posibilidades de repetir victoria, de lo igualado que está el Mundial y de la decisión de Álex de seguir en Moto2.

Sachsenring
Márquez: “Sueño con competir contra mi hermano en MotoGP”
JOSEP LAGOAFP

Se podría titular de muchas maneras la comparecencia de Marc Márquez ante los medios tras la rueda de prensa de Sachsenring, con la que ha arrancado el GP de Alemania. En AS hemos optado por darle continuidad a la noticia de la renovación de su hermano Álex Márquez con el Estrella Galicia Marc VDS para seguir en Moto2 en 2018, con la esperanza para el campeón de que puedan compartir parrilla en MotoGP en 2019 y quién sabe si incluso en el mismo box.

-¿Por qué es invencible aquí, con siete victorias y siete poles consecutivas?

-Las curvas de izquierda se me dan un poco mejor y cuando dijeron que reasfaltaban yo no quería que lo hicieran. (Sonrisas). Cuando ganas quieres que no toquen nada, pero cada año es diferente y este año más. El asfalto es nuevo. Veremos cómo trabajan los neumáticos, veremos cómo va todo porque aquí nadie ha entrenado con este asfalto y sobre todo el tiempo, que la predicción del tiempo no es buena, sobre todo para el domingo y si es con agua será todo mucho más abierto.

-Se supone que usted es quien se adapta más rápido a los circuitos nuevos y las condiciones cambiantes.

-Bueno, no es un circuito nuevo. Es asfalto nuevo y como mucho yo supongo que tendrá más grip. Yo en situaciones que hay poco grip me adapto bastante bien y es uno de mis puntos fuertes. Cuando hay más grip todo se iguala mucho más y yo creo que se verá. No se puede hablar ya que el asfalto nuevo, a veces, por ser nuevo, tiene menos grip o se destrozan los neumáticos o pueden pasar mil cosas, pero intentaremos estar preparados. Lo bueno es que más o menos en todas las situaciones estamos ahí, nunca o en ninguna situación nos descolgamos mucho de las posiciones de cabeza.

-¿Qué es lo más difícil de pelear en el campeonato con tantos rivales?

-Los más difícil, y más estando por detrás, es que si puedes lo tienes que intentar. Si puedes ganar no te puedes guardar nada y más en una carrera de agua. Por ejemplo, el año pasado vinieron carreras de agua, tenía un cierto margen de ventaja y podía gestionarlo de una manera diferente, pero este año una carrera de agua es una carrera normal. Si puedes ganar cinco puntos más lo tienes que intentar y lo intentaremos, pero ha pasado todo lo que ha pasado en ocho carreras, así que imagínate lo que puede pasar en las diez carreras que quedan.

-¿Llegar a sitios en los que gana siempre le genera más presión?

-Me lo tomo más como una gran oportunidad de intentar conseguir la victoria, pero también soy consciente de que el domingo en el warm up, si veo que no puedo ganar la carrera, tengo que entenderlo. Sí que hay la presión mediática de que si he ganado siete tengo que ganar ocho veces, pero algún año, será éste o el que viene, llegará un año que no ganaré ni aquí ni en Austin. Así que bueno, esperemos que no pase, que sea el año que viene y no éste, pero ya veremos. Crea un poco de tranquilidad porque sabes que en pilotaje te adaptas bien, así que al final haces lo que sabes.

-Tal y como está el campeonato, ¿es más importante ser regular o atacar?

-Atacar. Ese ha sido siempre mi estilo, aunque hay que ver el feeling encima de la moto. Es verdad que en Holanda estaba calmado, pero no me caí en la segunda vuelta de milagro, al cerrarse la dirección entrando en meta.

-Con lo acostumbrado que está a ganar, sólo lleva una victoria en ocho carreras. ¿Cómo encaja eso?

-Quiero ganar y me gustaría hacerlo más, pero estamos once puntos del líder y miro esto en vez de cuántas victorias llevo.

-¿Está más tranquilo este año que el pasado a estas alturas del campeonato?

-Podría sonreír más. (Risas). Si estás líder, como en 2014, ahí todo sí que es cachondeo y risas, porque todo salía bien. Cuando vas cuarto en el campeonato y llevas dos caídas, es evidente que las cosas no son fáciles, pero lo importante es no rendirse hasta el final.

-¿Contento con la decisión de su hermano de seguir en Moto2?

-La decisión se habla en casa y todos íbamos en la misma dirección. Es una decisión acertada. Paso por paso, porque al final es el primer año que está luchando por podios y victorias en Moto2 y tiene aún que aprender cosas ahí, como peleas de última vuelta con motos grandes. Un año más le servirá para curtirse más y, si se lo gana, a lo mejor me quita el sitio a mí en 2019.

-Álex reconoce que tuvo alguna duda sobre si seguir en Moto2 o subir a MotoGP. ¿Usted también la tuvo a la hora de aconsejarle que se quedara?

-Hombre, está claro que te entran las dudas, porque cuando te dan la mínima posibilidad de subir a MotoGP es eso, pero también hay que saber valorar qué es MotoGP, qué ofertas tienes. Y sabes que cuando vas ahí es para hacerlo bien. No puedes subir y luego volver atrás. Hay muchos años por delante. Sólo tiene 21 años. Es cierto que yo subí mucho más joven, pero cada uno requiere su tiempo y mi hermano es más diésel, pero cuando pilla la carrerilla ya no para.

-¿Cuántas posibilidades hay o cuánto sueña verse un día junto a su hermano en el box del Repsol Honda de MotoGP?

-(Se ríe). El primer sueño que tengo es el de poder competir contra él en MotoGP, pero esto son cosas que cada piloto se tiene que ganar. Las puertas en cualquier sitio, y menos en el deporte, no se abren por ser el hermano o el hijo de… Aquí se abren con la mano derecha. Si das más gas se abren las puertas. De lo contrario no se abren.