Jenson Button provocó un accidente intentando adelantar a Pascal Wehrlein en la entrada del túnel. Era la vuelta 61 del GP de Mónaco cuando el Sauber del alemán se impulsó con su rueda trasera derecha sobre la rueda delantera izquierda del británico y terminó adosado al muro verticalmente, en equilibrio, afortunadamente sin consecuencias físicas para el piloto. Antes el británico ya había tocado el lateral del otro coche.
Eso destrozó también la dirección del McLaren número 22, abandonó después de haber marchado último durante toda la jornada. "El día divertido era el sábado", reconocía ayer Button tras una gran sesión de clasificación, pues era consciente de que saliendo último apenas tendría oportunidades.