La F1 se aburre en China y se entretiene con... ¡Darth Vader!
Con una pista sin actividad, la grada y los pilotos colaboraron para amenizar la larga espera hasta la cancelación definitiva de los libres.
En el primer día de actividad del GP de China la noticia es que no hubo actividad. El helicóptero no podía volar en caso de emergencia por la niebla que inundaba el noroeste de Shanghái y los monoplazas no pudieron si quiera pisar el asfalto en la segunda sesión de libres. Así, tras poder hacer algunos apenas unas vueltas en los Libres 1, quedó un viernes completamente inservible y que solo mereció la pena por las gracias que siempre ocurren cuando hay que matar el tiempo para no caer en el tedio más absoluto.
En estos casos, hay que mirar a la grada, y lo más destacado de todo lo que pasó en ella llegó del lado oscuro… La realización, buscando algo que mostrar entre el variopinto público chino, dio con un espectador caracterizado como Darth Vader al que dedicó su propia infografía como Lord Sith. El Comandante de la Flota Imperial, ataviado con ropaje de Red Bull, se vino arriba y dedicó uno de sus gestos característicos usando la Fuerza contra la cámara.
En otra parte, un grupo de seguidores de Vettel hacían el intento de montar un mensaje al de Ferrari con letras y banderas alemanas. Y decimos que intentaron porque no les salió bien a la primera. En lugar de acabar su nombre con una 'L' lo hicieron con otra 'E', escribiendo 'VETTEE' y el propio Seb sentado en su SF70H les indicaba su error. Una vez corregido, les daba el visto bueno con gracia.
Vettel también fue protagonista de otra imagen divertida de la grada. Una fan disfrazado con su vestimenta de piloto posaba junto a otro que imitaba a Alonso y un tercero que iba de 'The Stig', el famoso y enigmático piloto del programa británico 'Top Gear'.
Y Fernando también puso su toque cómico a la no sesión de entrenamientos colgando sus guantes y su gorra en T-Wing que estrena McLaren en China como si fuera un perchero.
Hamilton también quiso participar en el show y saltó a la pista para grabar con su móvil a la grada y regalar merchandising. Pérez jugando al fútbol, Ricciardo firmando autógrafos y más historias del pit lane y la grada amenizaron la eterna espera de una acción que nunca llegó.