Rossi debe emular a Doohan para lograr su décimo título
El título conquistado por el australiano en 1998 cuando sumó tres abandonos es el espejo en el que se mira el italiano para hacerse con el campeonato este año.
Hablar de Rossi y Doohan significa hablar de dos auténticas leyendas del motociclismo. El australiano, entre sus múltiples hazañas, posee una que hasta la fecha sigue siendo inalcanzable para cualquier mortal. Y es que ningún piloto de la categoría reina ha ganado el título con 3 o más carreras sin finalizar, salvo él.
El bueno de Mick lo hizo en 1998, logrando su quinto y último título en 500cc. Hizo tres ceros: en la cita inaugural de Japón, en el circuito del Jarama y en el circuito de Brno en la República Checa. A falta de 7 carreras para acabar ese mundial, sumó un buen puñado de victorias (hasta 8) para darle la vuelta al liderato que ostentaba Max Biaggi y proclamarse campeón del mundo.
Doohan es el espejo en el que se mira este año Valentino Rossi. Él hasta ahora ya suma tres ceros: por caída en Austin, rotura de motor en Mugello y de nuevo por caída en Assen cuando lideraba la carrera. En lo positivo: dos contundentes victorias en Jerez y Cataluña.
Restaban 7 carreras cuando Doohan hizo su último 0 en 1998, algo que Rossi ya ha hecho este año. Por fortuna para el transalpino, tiene más carreras por delante para enmendar sus errores hasta final de temporada, un total de 10. 'Il Dottore' ya ha gastado todas las vidas que le quedaban y son pocos los elegidos que pueden darle la vuelta a una situación tan crítica y alcanzar la cima. Vale es uno de ellos.