NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

MOTOCICLISMO | ÁNGEL NIETO

"Lloraba todos los días, pero se me pasaba pensando en motos"

El zamorano 12+1 veces campeón del mundo habla de su vida con Bertín Osborne en Telecinco: "A pesar de las dificultades he sido muy feliz".

Ángel Nieto durante la entrevista con Bertín Osborne en 'Mi casa es la tuya'.
Telecinco

Es una de las leyendas vivas más importantes de nuestro deporte. Cuenta prácticamente la totalidad de sus años como piloto con títulos de campeón. Empezó ganando su primera carrera en España en 1965 y no dejó de hacerlo hasta su último triunfo en 1985. Ángel Nieto lleva toda una vida dedicada a la pasión que le hace levantarse cada día, las motos, y habló largo y tendido sobre ella con Bertín Osborne en el programa de Telecinco ‘Mi casa es la tuya’.

En él explicó muchas cosas, como su famosa superstición del 12+1: "Tuve un accidente en Benidorm, un domingo que era el 1 con el 3, en plena recta me quedé sin frenos. Es la única vez que me he tirado de una moto porque vi que me hacía mucho daño. Le partí la tibia a un operario y la moto se fue hacía la gente. A un hombre le amputaron una pierna, otro estuvo muy grave... Lo pasé fatal. Es el accidente más desagradable que he tenido. Todas las ganancias de los premios las doné a los heridos. Fue muy duro".

El zamorano llegó a ser el piloto más exitoso de España, pero tuvo que andar un camino lleno de obstáculos para conseguirlo. Una infancia difícil cuando su familia se mudó a Madrid: "No teníamos agua corriente... Poco a poco fuimos mejorando. A pesar de las dificultades he sido muy feliz". Y la incomprensión de sus padres cuando a los 13 años ya le picó el gusanillo de las motos: "No entendían de ello, pusieron el grito en el cielo. Mi madre se ha gastado una pasta en velas, siempre las ponía cuando corría".

Su empeño por las dos ruedas le llevó a Barcelona, donde consiguió su primer trabajo en Bultaco: "Limpiaba barro de las motocicletas hasta que me cansé y me fui. Lloraba todos los días. Hacía la maleta para volver a casa cada noche, pero después pensaba en las motos y se me pasaba. Tenía muy claro que quería ser piloto de motos". No sólo lo logró, sino que fue el mejor, aunque se tardó tiempo en saber: "De mi primer Mundial (en 1969) no se enteró nadie, antes no había la pasión por las motos que hay hoy".

"Estaba en Austria, en un circuito peligroso. Salía en primera línea, miré hacía abajo y me pregunté: '¿Qué hago aquí?' Ahí lo supe. Pesan mucho 25 años en el Mundial, estaba entero y tenía una familia", cuenta sobre su retirada en 1986. Después, tuvo la ilusión de ver a su sobrino Fonsi ganando campeonatos como él: "Este fue tonto. Tendría que tener colgados en casa uno o dos campeonatos del mundo por lo menos. Se dejó deslumbrar por los flashes y la fama". Ángel Nieto en estado puro. El Ángel Nieto que nos gusta.