Aleix Espargaró: “Me iré donde realmente me quieran”

 -¿Cómo está? Se le sigue viendo enfadado con Suzuki.

-Enfadado no, lo que me han dado ha sido espectacular. La posibilidad de ser piloto oficial por primera vez, poder evolucionar una moto que no iba y hacer una moto muy, muy competitiva, el salario que he tenido, el trato que he tenido ha sido espectacular en Suzuki. Pero sí que estoy dolido. Al final, soy sexto en el campeonato… da igual, al final es darle siempre vueltas al mismo tema.

-No da igual…

-No depende de mí, yo no puedo hacer nada. Suzuki es una fábrica grande, es una empresa muy grande, no sé qué parte de Suzuki, o si todo Suzuki, quiere hacer un proyecto con un joven. No lo tengo muy claro, tampoco me han dado explicaciones aún, no sé si ellos lo tienen ya muy claro, pero la sensación que me da es que no valoran el trabajo y eso es lo que a mí realmente me frustra un poco. Hasta Maverick mismo lo dijo el otro día en la rueda de prensa hablando conmigo, que va muy rápido pero que él el año pasado no sabía cómo iba la MotoGP, y que si no hubiera estado yo desarrollando la moto con paciencia, probando todo, quizás no estaría aquí. Que te diga esto un piloto como Maverick Viñales que ha firmado por Yamaha es algo que le honra mucho y que aún me hace estar más triste. Pero es así, no pasa nada.

-Tiene alternativas.

-Sí, sí, sí, hay varias cosas.

-¿Aprilia sobre todo?

-No, y hay varias más. Aprilia es una opción muy buena, tienen una moto que no me parece tan mala moto. Por ejemplo en Jerez, que casi hago podio el domingo, casi me saca de la Q2 yendo detrás de mí. Es decir, que la moto no funciona mal. Hay otras ofertas con motos oficiales en equipos privados, hay dos fábricas en SBK que realmente me lo estoy pensando más de lo que la gente se piensa. Lo más importante al final es que, vayas a Aprilia, o a una Ducati satélite, no voy a ganar el Mundial. Y allí en SBK quizás sí. Así que lo más importante es ser feliz, ir donde realmente me quieran y donde haya un proyecto deportivo que me convenza.

-Y ahora se va su hermano a un equipo de fábrica, por fin.¿Cuál es el mejor consejo que le puedes dar?

-No va a ser fácil, porque KTM es una moto nueva y tiene la particularidad de que lleva un chasis tubular. Yo, como he estado en Suzuki, y mira que para mí el mejor equipo del mundo es Aspar, porque no sé si no estaba mejor en mi casa que allí, pero lo que me ha dado Suzuki, el nivel, la calidad de vida de un piloto en Suzuki, es incomparable con nada. Por recursos. Yo qué sé, si quería una pantalla de otro color en la moto la tenía la semana siguiente. Y eso solo te lo puede dar una fábrica. Así que hay que saber usarlo, hay que trabajar muy duro y creo que en Suzuki lo hemos demostrado. Todos os acordáis cómo iba la moto con Randy, el resultado que hizo en Valencia. Y ahora en todos los fines de semana Maverick y yo estamos muy cerca de los de delante, es algo por lo que estar orgulloso, y que no es fácil.

-Aquí hizo doblete Suzuki el año pasdo en la calificación el año pasado. ¿Se puede repetir el sábado y hacer podio el domingo?

-Sería genial. Lo del sábado no me quita el sueño, aunque fui muy feliz el sábado. Pero estoy más orgulloso del domingo que del sábado del año pasado. De hecho, salí bien pero a final de meta era el doce, porque el año pasado la potencia era el problema, y las diez primeras vueltas o doce creo que perdí una o dos décimas con el grupo de cabeza, iba cuarto durante toda la carrera hasta que me caí a falta de cinco vueltas. Así que con un poco de potencia más este año se puede soñar.

-En Valencia probaron un chasis nuevo que les gustó, porque al principio el de 2016 no le gustaba.

-Estoy sexto del Mundial a pesar del inicio con el otro chasis. La carrera de Qatar es en la que peor lo he pasado de mi vida. Y en Argentina me caí. Es decir, que a pesar de esto estar sexto del Mundial es bueno, el chasis fue el problema principal, no me gustó nada, y en Valencia probamos dos distintos. Dos, quizás, con un base más 2015, pero distintos. Creo que Maverick va a usar los dos, yo voy usar el 2015 y otro que me gustó mucho. Veremos cómo van.

-¿En Valencia iban mejor que con el 2015?

-Íbamos muy parecido. Realmente no son motos diferentes, son dos chasis que se cambian poco, trabajando en buscar más o menos rigidez, ganando estabilidad en un sitio, entrar mejor en otro y hay pocas diferencias. Siempre lo que ganas en un sitio lo pierdes en otro y me pareció que hay un chasis que te da un poco más de estabilidad en la entrada de las curvas rápidas y por eso lo voy a usar aquí en Barcelona.