"Mónaco es una procesión, ¿por qué no tenemos más paradas?"
El británico anticipa una carrera con un coche tras otro y pide neumáticos más blandos en el futuro para evitar estrategias de una sola parada.
Es innegable. El escenario de Mónaco es el más especial del calendario de la Fórmula 1. Cada una de sus curvas respira historia y sus muros amenazan con castigar al piloto que cometa el más mínimo fallo. Es todo un reto enfrentarse a este titán de asfalto rodeado de glamour y yates, pero también es cierto que sus carreras son las más predecibles. Y Hamilton espera que la de mañana también la sea. A lo difícil que es adelantar se une un asfalto que castiga poco las ruedas, incluso las ultrablandas.
El compuesto más blando fabricado por Pirelli especialmente para carreras urbanas de este tipo tampoco funciona como debería y no evitará que las estrategias se simplifiquen a una sola parada. "Por desgracia, lo más probable es que suceda exactamente lo mismo que los años anteriores: una carrera con una sola parada, que es lo más aburrida. Todo el mundo aquí sabe que si tienes la pole vas a ganar, es una procesión. ¿Por qué no tenemos más paradas?", se pregunta Lewis en declaraciones para 'Autosport'.
Más movimiento en boxes se traduciría en un mayor número de cambios de posiciones y en más incógnitas, pero para eso el británico dice que se necesitarían compuestos muchos más blandos: "Para mí, el ultrablando es el superblando pero coloreado de morado. Necesitamos neumáticos cuatro veces más blandos para tener más paradas. Eso mezclaría todo. Este año vamos a ser dos segundos más rápidos que el año pasado, pero los adelantamientos todavía serán los mismos".
Así que el de Mercedes no quiere engañar a nadie. La carrera se disputará el sábado con la calificación más importante del año, el domingo será la procesión. "Todo el que esté esperando una buena carrera debe saber que esta es una pista en la que no se puede adelantar, por lo que la calificación va a ser la carrera. Pueden pasar algunas cosas, pero en general, no van a vernos luchando, van a ver coches siguiéndose", anticipa Hamilton. Así, disfrutemos de un sábado vertiginoso. Y el domingo… nunca se sabe.