Mercedes paga 4.481.327 euros por conseguir los 703 puntos

Siempre es complicado firmar ese cheque. Con este sistema, si sumas muchos puntos debes pagar mucho dinero. Es muy caro, pero estamos aquí para ganar, así que si tenemos que pagar mucho es porque ha sido una buena temporada. Por lo tanto se trata de un sentimiento semiamargo”, explicaba Toto Wolff, director deportivo de Mercedes, después de estampar su firma en un cheque dirigido a la FIA con la inscripción de Mercedes para el Mundial de Fórmula 1 2016 como concepto. Semejante suma es el récord absoluto de dinero que un equipo ha pagado en la historia del certamen como matrícula.

¿Por qué tanto? Fácil explicación. En 2013 se decidió que las escuderías deberían abonar una cuota fija de 516.128 dólares (estipulada por el IPC de EE UU) que con el cambio vigente, equivalen a 474.931 euros. ¿Y el resto? En ese momento también se decidió instaurar que deberían pagar 6.194 dólares (5.699 euros actualmente) por punto sumado en el campeonato de constructores. Es decir, batir la marca de puntos a Mercedes le ha salido muy caro. 703 puntos se transforman en cuatro millones de euros. Por tanto, por ejemplo, Manor ha pagado 474.931 euros para correr en 2016 al no sumar ningún punto, mientras Mercedes apoquinó la nada desdeñable cifra de 4.481.327 euros. Eso sí, tan solo 10.980 más que la temporada anterior.

“Conseguir muchos puntos no es lo más importante, se trata de ganar el campeonato y todas las carreras posibles. Para mí, personalmente, el número de puntos, aunque sea la mayor cantidad jamás lograda, es solamente un número reflejado en un libro”, reconocía Wolff, quizá algo contrariado por tener que desembolsar semejante suma. Algo que seguro queda bastante mitigado para el dirigente austriaco y los dueños alemanes por los más de cien millones de euros recibidos en concepto de pagos de la FOM (entidad encargada de la gestión y las cuestiones financieras de la F-1) por hacerse con el ansiado título del campeonato de constructores. Una cantidad que no se conoce con exactitud ya que los ingresos que perciben los equipos, según su puesto en el certamen, están bajo secreto en el denominado ‘Pacto de la Concordia’. Este acuerdo, vigente desde 2013 y que se prorrogará hasta 2020, regula el marco legal del campeonato de F-1 y lo firmaron todos los equipos participantes, la FIA y el ‘Formula One Group’.

Más allá de las cuestiones puramente financieras, el abrumador dominio en la pista explicado en sus dieciséis victorias, doce dobletes, 18 poles, trece vueltas rápidas, 32 podios y 936 vueltas en cabeza ha traído más beneficios que perjuicios a los de Stuttgart en cuestiones como repercusión de marca, llegada de patrocinadores y contratos publicitarios. Seguro que para 2017 firman pagar aún más dinero en concepto de inscripción. Significará que habrán repetido doblete... aunque la emoción haya brillado por su ausencia.