Ana Carrasco fue ‘castigada’ sin moto por problemas económicos

Difícil papeleta para Ana Carrasco y su escudería en el Mundial de Moto3, el RW Racing GP, que ha decidido castigarla sin moto la primera jornada de Misano al no estar al corriente de pago con el equipo. Por extraño que a alguno le pueda resultar, a pesar de jugarse la vida en el Mundial hay muchos pilotos que pagan por correr, a través de patrocinadores o directamente de sus bolsillos, y la murciana es una más. En su caso, firmó para esta temporada con el holandés Roelof Waninge para pilotar la Kalex KTM por una cifra cercana a los 250.000 euros, de los cuales sólo ha pagado la mitad.

Queda la otra mitad y Jarno Hansen, team manager del RW Racing GP, explica bastante tenso a AS el panorama que les ha llevado a tomar esta decisión: “El problema no es de este fin de semana sino que lo llevamos arrastrando mucho tiempo atrás y no llega la solución. No es completamente culpa de Ana, pero desafortunadamente la gente y los patrocinadores la prometen un dinero que luego no pagan. Esto significa que ella no tiene el dinero para cumplir el contrato firmado. Llevamos intentado desde Argentina hablar de esto y cada vez dice que más adelante, y más adelante, y más adelante, así que esta mañana he tenido una larga reunión con ella y la he dicho que estamos en un punto crítico y que es muy difícil continuar con esta situación, porque no recibo nada por su parte. La pregunto una y otra vez y me dice que no cree que tenga el dinero para acabar la temporada. Yo quiero acabar la temporada, pero no podemos hacerlo de esta manera. Por la tarde hemos hablado otra vez y decidido que saliera a la pista, para hablar más tarde, pero estaba muy emocionada y hemos decidido que mejor no saliera, por su seguridad y la de los otros pilotos. Necesita relajarse por la noche. El problema sigue ahí y es un gran problema. Espero que podamos solucionarlo, aunque ahora no estoy seguro de que podamos hacerlo. Es mucho dinero lo que hace falta para terminar el campeonato. Ha pagado una parte de lo firmado, pero queda y aunque hay mucha gente que la ayuda, no hace nada. La situación es terrible, pero vivimos en el mundo real y esto funciona así. El sábado saldrá a la pista y para que esté en Alcañiz necesitaremos encontrar una solución. Todavía no he hablado con otros pilotos, porque queremos terminar la temporada con Ana. Espero que nos entiendan”.

Lo que no cuenta Janssen es la presión a la que tienen sometida a la murciana, a la que sólo comunicaron a ultimísima hora que viajara hasta Misano, donde llegó el jueves por la noche, acompañada por su padre y su mecánico de confianza. Ni que no cuenta con telemétrico en el box y que la puesta a punto de su moto deja mucho que desear en ocasiones.