Dani Sordo vuelve a soñar con el triunfo tras el accidente de Ogier

Se repite el guión del pasado año. En 2013 el Rally de Alemania comenzó con un paseo militar de los Volkswagen de Sebastien Ogier y Jari Matti Latvala. Pero primero cayó el francés al sufrir una salida de carretera que le dejaba fuera de combate, que dejó al finlandés en cabeza. Y eso es lo que ha ocurrido hoy en la primera jornada de la prueba germana. Luego abandonó Latvala… y ganó Dani Sordo.

Una repetición de acontecimientos que vuelve a hacernos soñar con un triunfo del cántabro, que marcha tercero en la general a tan sólo 5,6 segundos del segundo, el Citroën de Kris Meeke. Pero este año tiene aún más mérito, porque corre con un coche nuevo, el Hyundai, y también porque partía en la décimo cuarta posición, con lo que se encontraba los tramos llenos de suciedad sacada por sus antecesores de las cunetas. “Cuando paso, ya no queda ni público”, bromeaba.

Lo que no es una broma es que el infalible Ogier ha cometido uno de sus escasos errores, y que el Mundial recupera emoción con su abandono. Y tampoco es broma que en la segunda jornada, con Sordo ya ubicado en el orden de salida al lado de sus rivales directos, es fácil que, cuanto menos, se desembarace de Meeke y… ¿por qué no soñar? Pensar en un nuevo triunfo. No obstante, tiene cinco rivales, Mikkelsen, Neuville, Hirvonen, Evans y Ostberg, pegados a sus espaldas. La segunda etapa tiene dos pasadas por el temido tramo de Panzerplatte, de 42 kilómetros, y se espera lluvia. Un panorama que aún puede darnos muchas sorpresas. Veremos.

Del resto de españoles, Xevi Pons acabó quinto entre los vehículos de su categoría en el debut con el Ford Fiesta, y Yeray Lemes lidera el Dmack Trophy tras ganar cuatro tramos. Nil Solans es sexto en esta categoría.