FÓRMULA 1 | GP DE ESPAÑA
Lewis Hamilton logra la pole; Fernando Alonso, séptimo
Detrás del inglés saldrán Rosberg y Ricciardo. Bottas, cuarto, por delante de Grosjean. El asturiano saldrá séptimo por detrás de su compañero Raikkonen.
El mejor coche que jamás se haya construido. Ya se escucha esto por el paddock. Ganarán todas las carreras. Esto también. Son invencibles. Por supuesto. El dominio de Mercedes es total y absoluto. En Montmeló, en Barcelona, en Cataluña, en España… también. La sesión clasificatoria de ayer fue un duelo entre Hamilton y Rosberg que terminó como era de esperar, con el británico en la pole.
Y es que cuando a uno de los mejores pilotos del planeta le das el coche más rápido sucede lo que está pasando este año en la Fórmula 1, lo que ha ocurrido en los años anteriores. Lewis Hamilton, Fernando Alonso y Sebastian Vettel. Opinión personal: son los tres mejores pilotos de la parrilla actual. Pues bien, el único de esos que no ha tenido un monoplaza dominante (palabra de nuevo de moda en esta competición) es el español. Seb lo tuvo y lo aprovechó, ya saben cuatro campeonatos seguidos. Hamilton lo está teniendo esta temporada. Y va camino de ser campeón, salvo catástrofe, salvo sorpresa, salvo reacción imposible. Los tres tuvieron, en esta sesión clasificatoria del GP de España, suerte distinta. Mucho.
Hamilton se hizo con la segunda pole consecutiva, cuarta del campeonato para el británico de Mercedes. Por delante de su compañero de equipo Nico Rosberg y de un excelente Daniel Ricciardo. El australiano sigue convenciendo con el Red Bull, lo esta haciendo genial el chico sonriente. De nuevo rostro bonito en el equipo energético en un año en el que la desgracia parece perseguir ahora a Sebastian. El campeón del mundo sufrió un problema en su coche y más tarde fue sancionado con cinco puestos por cambiar la caja de cambios, saldrá decimoquinto.
Muy bien Hamilton, muy mal Vettel. ¿Y Alonso? Regular siendo benévolo. Por delante de Fernando, también, Kimi con su mismo coche, Valteri Bottas con el Williams, cuarto, y Romain Grosjean con un Lotus que empieza a funcionar, quinto. Regular tirando a mal. Hoy más. Y mejor.
En las gradas, cuatro mil personas menos que el año pasado, recordemos que acabó con victoria de Alonso, y en todo caso más de 64.500 aficionados en el circuito de Montmeló. Hoy serán casi cien mil almas en las gradas esperando un milagro. Otro más.