Sebastien Ogier prolonga su reinado con un nuevo triunfo

Sebastien Ogier prolonga su reinado con un nuevo triunfo. El campeón y dominador absoluto de la pasada temporada se ha anotado su primer triunfo mundialista en el Rally de Montecarlo, donde ya había ganado en 2009, cuando no era puntuable para el Campeonato del Mundo. Una victoria que hace pensar que este año el monólogo del francés puede ser aún más rotundo.

Y eso que el rally comenzó mal para Ogier, que se vio penalizado al abrir pista en la primera etapa y llegó a estar situado en novena posición. Pero a partir de la segunda puso en marcha la apisonadora, y de nuevo se repuso, como ya hiciera el pasado año en los rallys de Francia y Cataluña, y nada ni nadie fue capaz de impedir su triunfo. Ni siquiera las dantescas condiciones del mítico Col de Turini, que estaba totalmente nevado, obligando a anular la segunda pasada al quedarse atascado uno de los participantes, han frenado al de Volkswagen, que inicia su reinado con un nuevo y rotundo triunfo.

En el podio le han acompañado dos hombres que se estrenan. Bryan Bouffier, como Ogier, ya había ganado en Montecarlo en 2011, cuando no era puntuable para el Mundial, pero su segundo puesto de ayer era el primer 'cajón' mundialista de su carrera. También se estrenaba en esas lides el británico Kris Meeke, que estrena su oficialidad con Citroën con un podio muy meritorio y positivo. El cuarto puesto de Mads Ostberg completaba el buen resultado del equipo francés. Jari-Matti Latvala era quinto, pero se embolsaba los tres puntos por ganar el Power Stage, en el que Ogier también se anotó dos del segundo puesto.

Tras lo visto en el rally da más pena el temprano abandono de Dani Sordo en su estreno con Hyundai. En una prueba tan movida y difícil el español podría haber culminado el debut con el i20 con un podio. Ahora habrá que esperar como mínimo hasta Portugal para volverle a ver al volante. Aunque su programa contemplaba los rallys de asfalto, es muy probable que se amplíe comenzando por la cita lusa.