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Declaraciones del piloto español

De la Rosa: "No me imagino sin un volante en mis manos"

El proyecto de Pedro de la Rosa con HRT se ha agotado y el catalán revela su faceta más personal en la web oficial de la F-1, pero con la competición siempre presente.

Actualizado a
Pedro de la Rosa
HRT

¿Qué le quita el sueño por las noches?

Al margen del jet lag, cuando la gente cambia de opinión sobre algo que te han dicho y después pretenden negar. Es algo que odio y que reconozco que a veces no me deja dormir.

Si pudiera hacer desaparecer algo de su vida para siempre, ¿qué sería?

La muerte de mi padre. Verle sufrir una enfermedad neurológica degenerativa y no poder hacer nada por él fue horrible.

¿Cuál es la lección de la vida más valiosa para usted?

Mi padre me dijo que cuando estrechas la mano de un hombre debes hacerlo con vigor y siempre mirándole a los ojos.

¿Qué admira más?

Admiro a la gente que es genuina. Admiro a la gente que ama lo que hace, independientemente de lo que sea.

Si pudiera darle un consejo a los jóvenes, ¿cuál sería?

Que durmieran menos y estudiaran más...

Si su carrera deportiva terminara al final de este año, ¿qué le gustaría hacer durante el resto de su vida?

No estoy seguro. Quisiera pasar más tiempo con mi familia, viajar menos, leer más, probablemente acabaría mis estudios universitarios... No estoy seguro, porque no me imagino sin un volante en mis manos.

¿Qué animal cree que reflejaría mejor su personalidad?

El perro, un buen amigo.

¿Qué es más importante que la victoria?

Sentir que eres el piloto más rápido que hay en la pista, sin importar el coche o la categoría en la que compitas.

¿En qué gastaría el último euro que tuviera?

En algunos caramelos para mis hijas.

¿Cuál es la principal debilidad de Pedro de la Rosa?

No me gusta viajar y en este trabajo en una gran debilidad. Es algo a lo que nunca me he podido enfrentar de forma conveniente.

¿Su comida favorita?

Una buena paella al borde del mar. Y siempre viajo con una barrita energética, prefiero evitar la comida de los aviones.

¿Qué es lo primero que hace al llegar a casa tras un gran premio?

Deshacer el equipaje, aunque sea tarde. Sólo cuando lo he hecho puedo dormir y pensar en el día siguiente.

¿A qué tiene miedo?

A una enfermedad contra la que no puedes hacer nada. Lo he vivido de cerca y entonces te das cuenta de lo vulnerables que somos las personas.

¿Su olor favorito?

La gasolina. Me gusta el olor de los motores de dos tiempos y su lubricante, no sintético... El de los viejos motores de karts.

¿Cuál es el mejor consejo que le han dado?

Un buen amigo me dijo que no pensara en la próxima carrera, ni siquiera a dos semanas vista, que lo hiciera a más largo plazo. Puede parecer obvio, pero los pilotos en ocasiones sólo miramos a corto plazo y en ocasiones es necesario tener más perspectiva.

¿Se siente feliz?

Me siento feliz porque creo que vivo muchos instantes de felicidad. Como me dijo un amigo, el momento más feliz del día es cuando miro por el retrovisor del coche y me encuentro con los ojos de mis hijas.

¿Qué lugar elegiría para pasar el resto de su vida?

Diría que Barcelona, donde nací. Un gran lugar, el mar, la montaña, la gente, el sol...