Fernando Alonso coge su calculadora belga

Mostraba su sonrisa acompañado de su hombre de confianza, Luis García Abad, al salir de la caseta de Ferrari en el paddock. Satisfecho. Y aún no sabía todo... La cita es de 'El Alquimista', de Paulo Coelho, pero aparece en todos los libros de autoayuda. "Cuando quieres algo, todo el universo conspira para que hagas realidad tu deseo".

Pues bien, Fernando Alonso debe querer más que ningún otro que el Mundial de 2012 sea suyo. Porque el universo continúa alineando planetas. Más allá del talento de este piloto mágico, algo repetido una y mil veces. Explicación. Fernando, después de una calificación en la que su Ferrari volvió a demostrar sus carencias, terminaba sexto. Pero sus rivales, excepto Raikkonen, estaban por detrás. Webber acababa séptimo, pero una sanción por sustituir su caja de cambios le dejaba cinco puestos más atrás. Hamilton, con una configuración de su coche distinta de la de su compañero Button que logró la indiscutible pole, sólo pudo ser octavo y saldrá séptimo por la sanción del australiano de Red Bull. Y Vettel, el antaño dominador de las calificaciones, ni siquiera entraba en la Q3 y hoy ocupará la décima plaza en la parrilla también beneficiado por el castigo a Webber.

Es decir que todos los que pueden hacer que su sueño de tercer título se tambalee verán en la salida el alerón trasero del Ferrari del español. Sólo que Alonso salía por el lado sucio de la pista... Vaya, qué pena. Pero... Maldonado, que logró el tercer mejor registro, fue investigado por obstruir a Hulkenberg en la vuelta buena del piloto alemán de Force India. El resultado fue una sanción de tres plazas para el venezolano de tal manera que Alonso finalmente sale quinto, por el lado limpio, y mete a Maldonado justo por delante de Hamilton.

Más cosas que pueden beneficiar a Alonso. El Ferrari volaba en el primer y el tercer sector, es decir los de menos curvas, en los que se necesita menor carga aerodinámica, algo que le puede ir muy bien en la carrera. Si hace una buena salida, como suele, será muy complicado que le adelanten porque las posibilidades de pasar están en esos dos sectores en los que el Ferrari logra los mejores parciales. El coche está configurado para eso, aunque que la estrategia funcione depende de si la degradación no es muy alta. Si los neumáticos se vienen abajo, ir rápido en el sector intermedio será vital.

El asturiano, en cualquier caso, saldrá con la calculadora en la mano, una que compró aquí en Spa tras deslumbrar en la F3000, porque él quiere ganar el título. Y pasar una carrera más puntuando y por delante de sus rivales debe ser el objetivo. Si además aprovecha alguna oportunidad que se le presente y sube al podio, aún mejor. Para ayudar a las conspiraciones del universo... Por si acaso.