"Alonso decidirá cuando sepa qué es lo mejor"

Otro órdago de Flavio Briatore que se queda en un simple farol. Y van dos. El jefe de Renault dijo el lunes que Fernando Alonso tomaría una decisión antes de hoy, cuando la realidad es que el bicampeón español tiene muy claro que sólo se decantará por alguna de las opciones que baraja en el momento que tenga definidas sus preferencias. Es decir, como contábamos ayer, que no admite presiones externas. Y el propio representante del piloto, Luis García-Abad, lo ha confirmado con claridad meridiana en declaraciones a la BBC: "Alonso tomará una decisión cuando sepa qué es lo mejor para su futuro".

Briatore tiene prisa porque quiere cerrar su programa 2008 lo antes posible. Necesita pilotos mediáticos y con proyección, unos patrocinadores que financien su escudería y también una respuesta para Heikki Kovalainen, el piloto que depende de la llegada de Alonso para seguir en Renault, una vez confirmado que Giancarlo Fisichella será sustituido por Nelsinho Piquet (que trae bajo el brazo el apoyo del hombre más rico del mundo, el mexicano Carlos Slim).

Pasa el tiempo y Alonso no responde, lo que refrenda la evidencia de que el asturiano no tiene tan claro que regresar a la marca del rombo sea lo mejor para sus aspiraciones. Mientras, Briatore presiona desde la Prensa y también con las influencias de algunos de los socios de su empresa de representación, comisionistas que esperan sacar tajada del fichaje del asturiano y de la presencia de empresas españolas en la escudería francesa.

Afortunadamente, Alonso sabe ya lo suficiente de este negocio como para no dejarse impresionar por promesas vacías o amenazas veladas, así que está dispuesto a tomarse el tiempo necesario para optar a las mejores oportunidades en una temporada que, cada día más, parece llamada a ser de transición hacia un futuro rojo Ferrari. Sigue considerando, desde luego, la oferta de Renault, pero no por ello dejando de lado otras factibles como la de Red Bull e incluso la de Toyota, que de momento no ha confirmado definitivamente que Jarno Trulli siga en su formación como compañero del recién fichado Timo Glock (de hecho, hace ya dos semanas se barajó que el italiano podría entrar a formar parte de los aspirantes a un volante en Force India, antes Spyker).

Y es que Alonso se ha convertido en la llave del mercado de pilotos para 2008. Su decisión desencadenará una serie de movimientos que pueden afectar incluso a su antiguo equipo, McLaren. La prensa alemana aseguraba ayer que la escudería británica le había hecho una oferta de cerca de quince millones de euros a Frank Williams para que liberase de su contrato a Nico Rosberg. Kovalainen es otro de los aspirantes a convertirse en el compañero de Hamilton, pero mientras que el español no responda a Renault, él tampoco puede cerrar ningún tipo de acuerdo con Ron Dennis.

Precisamente de Rosberg y su supuesto fichaje por McLaren habló ayer otra de las vacas sagradas de la F-1, Willi Weber, el mánager de Michael Schumacher. Y lo hizo para quitarle la idea de la cabeza al alemán: "McLaren seguramente destrozaría su carrera. Digan lo que digan, Hamilton es su número uno y eso sería fatal para un joven como Nico".