Red Bull es ahora su prioridad para el futuro

La pregunta del millón: ¿Y con quién correrá Fernando Alonso en 2008? Desvinculado ya de McLaren, el asturiano debe buscar una escudería para seguir en la brecha. Ofertas no le faltan, pero se enfrenta con dos dificultades principales: los volantes competitivos, de primerísimo nivel, ya están ocupados y su prioridad es no firmar un contrato de larga duración que le cierre las puertas, ya entreabiertas, de Ferrari.

En esta coyuntura nada sencilla, los representantes del piloto buscan la alternativa más válida. La decisión no parece que vaya a ser inminente, puesto que muchos y complejos son los flecos por resolver. Pero en estos momentos, la principal alternativa para el asturiano es Red Bull. La escudería de la bebida energética tiene presupuesto suficiente para evolucionar, muchas ganas de mejorar su posicionamiento en la parrilla y, sobre todo, le ofrece al español un contrato de un único año con la opción de renovar otro más.

Es una combinación aceptable, que no perfecta, para Fernando. Con su talento, su capacidad de trabajo, los motores de Renault y el dinero suficiente podría colocar a Red Bull a la estela de los tres grandes del campeonato. Pero, sobre todo, nadie le pondría problemas para marcharse a Maranello ya en 2009 cuando su fichaje se confirme.

La opción de Toyota no entusiasma al bicampeón, pero sigue viva. El principal argumento del equipo japonés es sus inconmensurables recursos financieros, aunque hasta ahora apenas le han servido de nada. Pero tampoco McLaren era en 2006 una formación ganadora y Alonso obró en ella el milagro... La situación, evidentemente, no es la misma, pero si en Toyota tampoco le ponen pegas a una posible salida, Fernando podría tener en cuenta tal posibilidad.

Durante meses, desde que se comenzó a especular con la ruptura entre McLaren y Alonso, Renault ha estado muy bien posicionada en las apuestas. Había razones para ello, sobre todo de tipo sentimental por su antigua relación, pero la realidad es que, a día de hoy, es el equipo peor colocado en la puja. La escudería actual no es la misma que hizo campeón al ovetense, entre otras cosas porque su presupuesto tampoco es tan boyante.

Y Flavio Briatore, que estaría encantado con la operación, tampoco tiene fácil encontrar más dinero. Para hacerlo, debe ofrecer a sus patrocinadores un contrato de larga duración (tres años) con la estrella española... justo lo que Fernando pretende evitar. Además, en el entorno de Renault se mueven ciertos personajes de los que el piloto quiere permanecer alejado.