Ferrari contraataca y denuncia a McLaren

La guerra entre McLaren y Ferrari no seguirá únicamente este fin de semana en el circuito de Hungaroring. Dos noticias volvieron ayer a remover todo el asunto del espionaje. Por un lado, la Alta Corte de Londres dijo que no están previstos más desarrollos en el caso de Ferrari contra Mike Coughlan. Por otra parte, 'La Gazzetta dello Sport' aseguraba que el equipo ha sabido que el recurso deportivo ante la FIA no será posible, ya que el organismo federativo mantiene que al no existir sanción tampoco hay lugar a dicha revisión del veredicto del Consejo Mundial.

Por eso motivo, y según las mismas fuentes, el equipo italiano habría presentado ayer, o como muy tarde hoy por la mañana, un informe de seis páginas ante el tribunal de Módena con un fin concreto: que el veredicto de la FIA sea consecuente con la culpabilidad que la propia entidad reconoce. La denuncia parte de las primeras líneas del comunicado del Consejo Mundial: "McLaren estaba en posesión de datos e informaciones confidenciales sobre Ferrari".

Precisamente ayer, el fiscal de Módena, Giuseppe Tibis, recibió la prueba pericial en el proceso que el equipo italiano lleva contra su ex técnico, Nigel Stepney, por supuesto sabotaje antes del GP de Mónaco y se sabrá qué sustancia empleó.

De esta forma al existir relación entre los dos casos, ya que el propio Stepney fue quien facilitó a Coughlan el dossier confidencial, se intenta que desde Italia se pudiera pedir una moratoria a la Alta Corte de Londres, conservando la posibilidad de solicitar una rogatoria internacional y así mantener la causa abierta en todos los frentes posibles, antes de la comparecencia del propio Stepney ante la FIA. Incluso no se descarta que se presente espontáneamente a declarar ante Tibis.

Las seis páginas que presenta Ferrari contra la resolución buscan responsables más allá de Coughlan. Según la declaración del propio imputado en Londres, los miembros del equipo británico que conocían la existencia de la información confidencial serían Jonathan Neale, Paddy Lowe, Martin Whitmarsh y Rob Taylor. Todo a espaldas de Ron Dennis al que no cita en ninguna declaración. Un capítulo más de una intriga que continuará.