Gal Guardians: Demon Purge, análisis. El universo Gal*Gun se pasa a la acción más directa

Gal Guardians: Demon Purge es lo último de Inti Creates. Un juego que combina el universo Gal*Gun con una jugabilidad y ambientación al más puro estilo Castlevania. Dos frentes tan dispares acaban formando un título tan divertido como dinámico, una aventura de acción frenética en la que acompañaremos a las hermanas Kamizono a lo largo del castillo demoníaco en el que se ha transformado la Academia Sakurazaki.

Kurona, chica demonio y estudiante de la academia demoníaca, provoca el caos fusionando la academia Sakurazaki con el dominio demoníaco, creando así su propio castillo. Una propuesta bajo la que todo el universo Gal*Gun se ve afectado, con un gran número de estudiantes involucrados en la fusión de dimensiones que requerirán nuestra ayuda. Un juego que podemos disfrutar en completo castellano y con un destacado doblaje al japonés e inglés.

Dos protagonistas, multitud de opciones

Desde el primer momento manejamos a Shinobu y Maya Kamizono, dos hermanas que podremos intercambiar en cualquier instante. La combinación entre ambas es indispensable para progresar de la mejor forma posible, y es que la jugabilidad de cada una está bien diferenciada.

Shinobu es la especialista a larga distancia gracias a su metralleta antidemonios, la cual tendremos que recargar para seguir destrozando a nuestros enemigos. Mientras que Maya destaca en el cuerpo a cuerpo gracias a su origami, una especie de estoque con el que sembraremos el terror por todo el castillo demoníaco.

Junto a las armas principales, cada una de las hermanas tiene a su disposición múltiples sub-armas que iremos añadiendo a nuestro arsenal conforme avancemos en la aventura, al más puro estilo Inti Creates, acabar con un jefe de nivel nos otorgará un sub-arma. De inicio Shinobu contará con unos cuchillos que nos servirán para acabar con objetivos aéreos y de gran tamaño; mientras que Maya podrá invocar un shikigami que nos dará protección.

El uso de estas armas secundarias consume puntos, variando la cantidad de estos según el arma que usemos, y los vamos rellenando con objetos de color azul que aparecen a lo largo de todo el juego. Las propias sub-armas no solo sirven para acabar con nuestros enemigos, y es que estas también nos facilitan el acceder a distintas áreas, cierta ayuda en secciones de plataformeo o abrir algunas puertas. Junto a la barra de puntos y la de salud, disponemos de una barra de purificación que cuando está llena nos permite ejecutar un ataque combinado entre ambas hermanas que en caso de impactar resulta devastador ante cualquier enemigo, y especialmente útil ante jefes.

Desde granadas antidemonios, pasando por grullas de papel, pingüinos, dinamita, paraguas, gancho de escalada, lanzacohetes, un muñeco houdai, una oonusa y una guillotina. El arsenal de armas secundarias es completo y variado, con algunas de claro perfil ofensivo, otras nos ayudarán a defendernos y algunas a avanzar por los niveles y llegar a lugares de difícil alcance.

Avanzar en la aventura también nos otorgará extras que mejorarán nuestras armas principales. Como balas extra en la metralleta antidemonios de Shinobu y un shuriken o doble salto en el caso de Maya al cargar su arma.

Acción directa desde el primer instante

Gal Guardians: Demon Purge nos invita a disfrutar con su acción arrolladora desde el primer instante. Podemos hacerlo de forma individual o en cooperativo, siendo una interesante opción que aumenta notablemente la rejugabilidad del título. Además de la acción necesitaremos situarnos, y para ello podremos usar una brújula que activaremos con el stick derecho, esta nos marcará por donde ir en el castillo: jefes, cofres…

Junto a todos los enemigos que nos encontramos, destacan los jefes finales, de enorme envergadura en su gran mayoría y con mecánicas muy distintas. Sin duda, uno de los puntos más destacados del título, que nos permitirá escoger dificultad casual o veterana en un inicio, pero que en ninguno de los casos supone un imposible y tanto jugadores novatos como experimentados podrán avanzar, disfrutar y superar la aventura sin mayores problemas.

Avanzaremos en la aventura, pero podremos volver al inicio de las etapas que hayamos completado en una zona previa al inicio de cada nivel. El progreso se guarda entre etapas, por lo que, si salimos del juego, la próxima vez empezaremos el nivel desde el comienzo, no desde los distintos checkpoints repartidos a lo largo de cada fase y que se mantienen únicamente durante nuestra sesión de juego. Además, Gal Guardians: Demon Purge cuenta con un sistema en el que, si uno de nuestros personajes cae, podremos resucitarlo. Esto no es automático, por lo que hay que tener especial cuidado para no caer en el intento mientras intentamos devolver a la vida a nuestra querida hermana.

La acción del juego se divide en el castillo demoníaco y sus distintas zonas: puertas del castillo, sala de ceremonias, cueva misteriosa, biblioteca, torre del reloj… Un clásico que evoca a Castlevania y otra obra de Inti Creates como Bloodstained: Curse of the Moon.

No todo en la vida es Metroidvania

Durante los últimos tiempos ha habido una tendencia en la industria, y es que un gran número de aventuras en 2D tenían componentes o eran directamente Metroidvania. La exploración, el backtracking como forma de vida, y es que este subgénero es uno de los favoritos entre los jugadores, pero no debemos olvidar la acción-aventura sobre la que se erigen sus cimientos. Es por eso que poder disfrutar eventualmente de títulos en 2D de acción directa es todo un regalo, y la tendencia es cada vez mayor en este sentido, con títulos para todos los gustos de forma continua.

Gal Guardians: Demon Purge nos propone ir al grano desde el primer instante, pese a que también nos ofrece la oportunidad de volver atrás, de forma opcional en la mayoría de casos para así completar todo lo que nos ofrece el juego. Su diseño de niveles pese a enganchar en un primer instante, rápidamente muestra cierta tendencia repetitiva, pudiendo haber ofrecido un reto superior con un mayor número de puzles u originalidad en torno al plataformeo o progresión en cada nivel. Además, el juego esconde una segunda vuelta al más puro estilo Symphony of the Night, que en su base jugable podemos verlo como un abuso de la repetición para extender la duración del juego, pero que se aprovecha con más diálogos y situaciones desternillantes entre todo el plantel del universo Gal*Gun.

Inti Creates, la desarrolladora japonesa fundada en 1996, ha creado todo tipo de videojuegos, pero ha terminado siendo especialmente reconocida por su trabajo con el 2D. Sagas como Mega Man Zero o Mega Man ZX destacan la excelsa calidad de un estudio que durante gran parte de su vida se especializó en trabajar para otras compañías. Fue en 2014 con Azure Striker Gunvolt cuando comenzaron no solo a desarrollar, sino también a publicar sus propias obras. Desde entonces, la gran mayoría de sus títulos pasan por sus manos en todos los sentidos posibles, y Gal Guardians: Demon Purge es su última creación.