Beyond: Two Souls, análisis PC: Así rinde en ordenador

Quantic Dream vive su particular transición al abrazar la independencia. Han sido muchos años los que han permanecido ligados a la plataforma de Sony; ahora, su futuro depende enteramente de las decisiones que tome la cúpula. De esta liberación nace la corriente de oportunidad que los usuarios de ordenador tienen ante si, y es que los tres últimos trabajos de la compañía ya se encuentran disponibles en la polémica Epic Game Store, por ahora en exclusiva.

Heavy Rain, Beyond: Two Souls y Detroit: Become Human llegan a la plataforma de compatibles con la esperanza de llegar a una masa mayor, una masa más predispuesta a disfrutar de experiencias de este calado. Desde MeriStation, ponemos nuestras zarpas en uno de ellos para comprobar qué tal rinde en su estreno lejos de consola. De entre el tridente francés elegimos el segundo, uno de los títulos que cerró el paso de PlayStation 3 en el ámbito exclusivo.

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Entre dos mundos

Un dúo formado por Ellen Page y Willem Dafoe solo puede darte lo mejor frente a la pantalla. Beyond: Two Souls es, quizá, uno de los juegos más experimentales del estudio en la última década. Esos saltos temporales narrativos crearon un progreso atípico para lo que estábamos acostumbrados, lo que hizo arquear más de una ceja por la falta de coherencia en algunos compases de la aventura.

Pese a las aristas, el juego brillaba por la cantidad de situaciones variadas por las que pasábamos junto a una Jodie Holmes con la que es fácil empatizar. 2013 fue un año en el que las experiencias narrativas ya se habían asentado, para fortuna del mercado global, saturado durante la pasada generación de propuestas shooter de calado similar. Normal, teniendo en cuenta que Modern Warfare redefinió un género al mismo tiempo que el auge del multijugador en línea se asentaba en todos los hogares.

Las posibilidades que ofrecía nuestro ‘ente’ del más allá permitía que se sintiera algo más libre a los mandos. Realidad y ficción se daban la mano para tratar temas espirituales, dignos de una reflexión interna que todos nos hemos hecho cuando maduramos. La muerte, el sentido de la vida, qué hay una vez fallecemos… todas las incógnitas, sin respuesta; solo podemos aferrarnos a nuestras creencias.

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Nuestro compañero Javier Andrés, en el análisis original, hablaba de la importancia de la dualidad de una joven llena de dudas. “El más allá y las relaciones interdimensionales, lo ético o lo irracional, todo desde los ojos de una joven muy distinta, peligrosa a veces y marginada a menudo por la unión espectral que no la abandona en ninguna ocasión”. Eso sí, dejó claro que no está pensado para todos los públicos: “Beyond evoluciona la fórmula de Heavy Rain y establece su propio lenguaje y mecánicas, no aptos para quienes busquen una aventura clásica o una puesta a prueba de su habilidad y reflejos a los mandos”.

Conversión a PC

Llega la hora de la verdad. En primer lugar debemos dejar claro que la edición que llega a ordenador se corresponde a la remasterización que recibió PlayStation 4, paquete que implementa mejoras no solo visuales, sino también jugables. Al inicio del juego se nos ofrece la posibilidad de poder disfrutar de la narrativa de manera cronológica, en vez de la original, como decíamos en párrafos anteriores. A su vez, la expansión ‘enhanced experiments’ se encuentra presente para meternos en una pequeña extensión de los puzles presentes durante todo el título.

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La gran duda al ponernos manos a la obra era cómo sería el trabajo de optimización. Para que no haya lugar a dudas, os dejamos el equipo con el que hemos trabajado en esta ocasión: i7 8700K, GPU 970 G1, 16GB de memoria y 1TB de HDD. Que vaya por delante la potencia que nos ofrece un equipo de gama alta, el cual nos ha permitido mover Beyond: Two Souls sin ningún problema; de hecho, hemos podido forzar la máquina para poder moverlo a mayor framerate del estándar.

Toda la gama de opciones gráficas que ofrece se encuentra dentro de los límites que todos los usuarios de la plataforma pueden hacer una idea. Eso sí, esperábamos un mejor uso del anti-aliasing, cuya función varía entre FXAA o SMAA, sin posibilidad de aumentar la fuerza del efecto. Lamentablemente para nosotros, las figuras no las encontramos tan definidas por ello, sufriendo de ‘bordes de sierra’ por todas la geometría.

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También esperábamos que el estudio se esforzara por permitir la eliminación de las bandas negras. Otros juegos como The Evil Within daban esta posibilidad frente a la pérdida de rendimiento. Sin embargo, Quantic Dream ha preferido dejarlas, quizá como una decisión artística frente a lo práctico que resultaría vivir la historia a pantalla completa. Pese a estos detallitos, cero problemas con el port, cuyos requisitos mínimos y recomendados podéis encontrar a través de este enlace.