El director de diseño de Destiny 2 se marcha de Bungie
Tras la separación de Activision y la toma de autopublicación de Bundie, Joe Blackburn firma por un estudio en Santa Monica para “perseguir” nuevos sueños.
Más cambios en Bungie. Tras la separación de Activision, lo que llevó consigo la adquisición total de los derechos de su última IP, Destiny, la compañía de Seattle vuelve a ser noticia; esta vez por el director creativo de Destiny 2, Joe Blackburn, que se marcha de Bungie. Su nuevo destino es un estudio localizado en Santa Monica, tal como se ha encargado de confiar él mismo.
“Tras un viaje increíble, hoy ha sido mi último día en Bungie”, comunicaba este pasado 27 de abril. “No sé cómo expresar lo mucho que significan para mí tanto Destiny como la gente que trabaja en el equipo. No me puedo esperar por ver lo que está por venir junto a todos vosotros”, comentaba en su cuenta personal de Twitter.
A raíz del mensaje no han sido pocos los que han preguntado no tanto el porqué de su salida, de su marcha, como el lugar donde se encontrará su nuevo destino laboral: Santa Monica. California es donde tendrá que buscar nuevo alojamiento, aunque no ha detallado todavía a qué estudio concreto se unirá a partir de ahora.
Solo por citar, en Santa Monica se encuentran célebres estudios del sector como Sony Santa Monica, Insomniac Games Riot Games, Treyarch o Naughty Dog, entre muchos otros.
Joe Blackburn no es el único diseñador de peso de Bungie que se marcha de la empresa en los últimos meses. A esta marcha tenemos que sumar el fin de la relación laboral de ésta con Josh Hamrick, Jon Weisnewski y Claude Jerome; también la escritora principal de Destiny 2, Jill Scharr.
Qué pasó con el romance Activision — Bungie
Las claves de la separación entre ambos estudios, una relación de ocho años iniciada en 2010, tiene varias raíces. La primera es que no salían las cuentas. Las cifras de ventas de Destiny 2 no lograron satisfacer las expectativas de la gigante americana, con comentarios esgrimidos por los propios jefes de operaciones de Activision como Cody Johnson, que fue contundente unos meses antes del suceso: “Algunas de nuestras franquicias como Destiny no están rindiendo tan bien como nos gustaría”.
Aunque la ruptura fue un pacto amistoso y respetuoso —al menos de puertas hacia afuera—, en realidad los reproches también tuvieron lugar. Otro motivo que puede explicar este primer punto es la caída de acciones Activision, donde el buen rendimiento de Call of Duty no fue óbice para la pérdida de valor en el mercado bursátil.
Finalmente, la mayor dedicación a Blizzard. El dinero que Activision dedicaba a Bungie y Destiny no era poco, precisamente. En el informe financiero de finales de 2018 se indicó que iban a dedicar más esfuerzos económicos a las IP otras de sus matrices, los padres de Overwatch. “Con nuestra notable comunidad de Destiny, estamos preparados para publicar por nuestra cuenta, mientras que Activision se centrará más en sus propias IP”, indicó Bungie en el comunicado.
Lo último que sabemos es que Bungie pagó 164 millones de dólares para ser libre. Veremos qué sucede con ellos ahora, que experimentan muchos cambios a nivel interno.
- Acción
Destiny 2, desarrollado por Bungie para PC, PlayStation 4, Xbox One y Stadia, es la secuela del título de acción first person shooter Destiny. La última ciudad segura de la humanidad ha caído ante una abrumadora fuerza invasora dirigida por Ghaul, el imponente comandante de la brutal Legión Roja, que ha despojado de su poder a los guardianes y obligado a huir a los supervivientes. Te aventurarás en mundos misteriosos e inexplorados del sistema solar para descubrir un arsenal de armas y nuevas habilidades de combate devastadoras. Para derrotar a la Legión Roja y hacer frente a Ghaul, deberás reunir a los héroes de la humanidad que han sobrevivido y luchar juntos para recuperar nuestro hogar. El juego base de Destiny 2 está disponible de forma gratuita.