Saltos de altura

Los juegos de conducción 'extrema' han sido prolíficos en los últimos años. La llegada de las modas y la forma de vida 'radikal' ha llenado muchos de los huecos que faltaban por cubrir en el mundo del motor con disciplinas más arriesgadas y espectaculares. Hace ya tiempo que tanto los juegos de skate, motocross, o los que como hoy nos ocupan con los ATV o más familiarmente conocidos como 'quads' se hacen protagonistas de competiciones, programas, festivales y, cómo no, juegos.

PURE es el resultado de la unión de BlackRock Studios y Disney Interactive. Su visión de la diversión con estos vehículos nerviosos, potentes y en ocasiones casi incontrolables ha llegado a dar a luz a un producto muy robusto en todos sus apartados. Estamos ante el que posiblemente sea el mejor juego de ATV's hecho hasta ahora, técnicamente hablando. Eso no quiere decir que no tenga fallos o lagunas, obviamente, sobre todo en su jugabilidad.

Lo realmente importante es que PURE posee una personalidad propia. Esto, aunque suene a algo lógico y propio de cada título, no lo es. Hay mucho 'copy-paste' en el mundo de los videojuegos, sobre todo cuando una idea funciona. Sin embargo, y aunque BlackRock Studios ya tienen experiencia en esto de los videojuegos con quads, es con PURE con quien logran su mayor cohesión global. No es fácil realizar un juego de conducción arcade, y menos de este estilo (con Motorstorm2 cerca, o BAJA Edge of control) de conducción salvaje y por entornos naturales, y no quedar en el olvido. PURE lo logra.

A simple vista, un juego arcade del género del que hoy nos ocupa tiene que ser dinámico, directo y espectacular. PURE cumple estos requisitos, pero además nos obsequia con un sistema de juego original y que deja mucho más en manos del usuario su utilización que la mayoría de los títulos del subgénero propio. El aprendizaje es rápido, pero controlarlo y saber qué hacer en cada momento es lo que llevará más tiempo.

Veamos qué han conseguido plasmar tanto en pantalla como en el pad. Tenemos nuestro quad preparado, pintado y 'armado' según nuestro estilo de conducción. ¿Nos van a amedrentar 15 pilotos? Qué va. ¿Cuestas empinadas y saltos estratosféricos? Tampoco. Sois la máquina y vosotros contra el mundo. Empecemos...

G r á f i c o s  .-
PURE es a los quads lo que Gran Turismo es a los coches. Así de simple y así de claro. El juego de BlackRock Studios entra por los ojos nada más empezar, y continúa gustando visualmente al usuario por muchas horas que se jueguen. Quizás estemos ante uno de los juegos de carreras más vistosos de esta generación (al menos hasta ahora). Eso no quita para que tenga detalles mejorables, pero técnicamente es de lo mejor visto hasta ahora.

Los menús son simples y de fácil navegación, aunque quizás se podría poner algo más de 'empeño' en darle una personalidad propia a nuestro paso por las distintas pantallas de configuración. La intro, así como las cinemáticas de carga antes de cada carrera están realizadas con el engine gráfico del juego, y los tiempos de carga deberían optimizarse algo más todavía.

Entrando en el aspecto visual del juego en sí, tenemos que decir que el engine gráfico de PURE es potente en todos los aspectos. Ya sea en texturizado, aplicación de la luz, modelados y distancia de renderizado, funciona de forma muy competente en todo momento y con una fluidez ciertamente contrastada. Su valoración global es muy alta, aún con la consabida existencia de defectos y ausencias que no deberían estar ahí. Sin embargo, su fluidez con 16 vehículos simultáneos es de gran mérito y el motor de colisiones muy robusto y fiable.

Quizás lo que más llame la atención de gran acabado visual del juego, sean los escenarios. Espacios abiertos de grandes dimensiones, y con caminos múltiples llenos de detalle. Tanto en su vegetación (árboles, plantas, frondosas zonas verdes,...) como en su construcción poligonal, llena de desniveles y con multitud de elementos móviles, así como algunos interactivos y destruibles (letreros, ruedas, cercas,...), PURE posee también algunos de los saltos acrobáticos más espectaculares debido a la altura que llega a coger el vehículo.

El texturizado de los entornos también tiene un nivel muy alto. Desde cabañas abandonadas llenas de tablas rotas, unas superficies con unas texturas de gran calidad en todo momento, zonas embarradas que salpican tierra con un efecto de partículas bastante logrado,... zonas desérticas que contrastan con la frondosidad de la vegetación de los circuitos europeos y sudamericanos. La variedad tampoco es muy grande, pero lo que hay está representado de forma más que brillante.

Los pilotos y los quads también poseen un modelado acorde con la calidad del resto del apartado gráfico. Los/as distintos pilotos tienen animaciones distintas en los tiempos de carga, y los movimientos acrobáticos son muy variados. Las transiciones entre las animaciones son bastante fluídas, destacando los 'aterrizajes' algo forzados que nos muestran cómo intentan recuperar el equilibrio. Las caídas poseen físicas ragdoll, y aunque no se muestran en todo su esplendor, son un pequeño punto negativo entre tanto detalle bueno.

La aplicación de la luz es otro de los detalles bien realizados, con una luz ambiente que le da personalidad a cada escenario, dotando de ciertos detalles cromáticos de la región a cada circuito, con un color predominante según el aspecto del terreno. La aplicación de sombras cumple su cometido de forma efectiva, y sólo la aparición de forma repetitiva de un efecto blur puede enturbiar un poco este apartado, aunque siendo justos hay que decir que se ha aplicado este efecto desenfoque para mostrar la sensación de pérdida de control de la moto en ciertos momentos.

Entre tanto punto positivo hay que destacar ciertos aspectos que creíamos mejores: el efecto 'ojo de pez' en los saltos es demasiado llamativo, mientras que los vehículos no tienen desperfectos en ningún momento (por muy fuerte que sea el golpe). Tampoco posee PURE variedad de cámaras para seguir la acción, aunque la que tiene realiza de forma efectiva su trabajo. Para finalizar con los detalles negativos, decir que no hay repeticiones donde disfrutar de las carreras, y las caídas son muy muy mejorables.

En definitiva, el global del apartado gráfico de PURE es de muy buena nota, aunque hay detalles ausentes que no entendemos, como la falta de los replays o de varias cámaras para seguir la acción. Por todo lo demás, el juego cumple y en condiciones brillantes. La suavidad y el espectáculo son las notas predominantes en el juego, y éstas se cumplen de forma sobrada. Quizás un multijugador a pantalla partida serviría para darle más importancia a un motor gráfico muy robusto y bien ejecutado.

M ú s i c a  .-
Temas pop, rock y punk para amenizar las carreras y los menús. Hay algunos muy famosos, como el ya famoso por Guitar Hero 'Woman', de Wolfmother. No hay quejas que ponerle al juego, ya que además utiliza un sistema de reproducción que hace que la canción se pause en el momento en que hacemos un gran salto, activándose los FX de sonido ambiente mientras 'volamos', volviendo la canción a su punto siguiente para seguir sonando en el momento en que tocamos tierra. La reproducción es buena, y la lista y estilo de canciones apropiada para el juego. Muy bien.

S o n i d o   F X  .-
Potentes en su reproducción, variados en sus posibilidades. Podemos oír diferentes motores, así como samplers para las distintas superficies sobre las que pasemos. Los choques y caídas no destacan, siendo éste su lunar más grande. Los comentarios, explicaciones y gritos del piloto están en perfecto castellano, con una interpretación buena, aunque las frases pueden llegar a cansar y hacerse repetitivas. Los Fx de sonido ambiente son perfectos para los momentos de los saltos más espectaculares. Bastante bien, pero con algún lunar mejorable.

J u g a b i l i d a d  .-
Este es su punto fuerte y, al mismo tiempo, lo que le hace perder más valoración a largo plazo. Hay que destacar que PURE posee una curva de aprendizaje bastante bien diseñada y original en cuanto a su desarrollo, sin embargo posee carencias o fallos de diseño que hacen que todo lo aprendido, en ocasiones, sea lo de menos. Nos explicamos.

El control del quad es muy similar a lo visto en el género hasta ahora: acelerar, frenar con los gatillos, balancear el cuerpo del piloto y el control de la dirección con el stick izquierdo, botones frontales para movimientos especiales, y botones de acción para turbo y movimientos normales. Hasta aquí todo está claro, pero es el sistema de evolución de movimientos lo que más nos ha gustado y nos ha llamado la atención.

Como es normal, para coger impulso antes del salto tenemos que 'colocar' el cuerpo del piloto hacia atrás y, al llegar a la pendiente, impulsar el cuerpo hacia delante para coger más velocidad y por ende, más altura en el salto. Es aquí cuando el sistema de saltos se vuelve más divertido y evolutivo en cada carrera. Y es que en todas las carreras podremos empezar de cero y llegar a los movimientos más espectaculares. No tendremos un desarrollo 'a largo plazo' de la experiencia del piloto en cuanto a salto, si no que será individual por cada carrera, lo que lo hace más inteligente.

Tendremos tres niveles de dificultad de saltos, y todos ellos se hacen pulsando uno de los tres botones de acción (el otro botón es para el turbo) y el pad direccional en cualquier dirección. Realizar los movimientos nos hará llenar la barra de 'emoción', y al llegar a cierto nivel de carga podremos realizar los movimientos del nivel intermedio. Lo mismo hasta llegar a los movimientos más difíciles. Una vez llena la barra con los movimientos avanzados, podremos realizar un movimiento especial pulsando los botones frontales y el consabido stick.

Estos movimientos son los más espectaculares, pero a la vez, los que llevan más tiempo realizar, con lo cual tendremos que calcular bien y conocer los saltos más largos para realizarlos en ese momento. Realizar un movimiento y no poder completarlo significa casi instantáneamente perder la carga necesaria para realizar los movimientos de ese mismo nivel, con lo cual necesitaremos volver a realizar los del nivel anterior hasta cargar la barra lo suficiente para poder volver a hacerlos.

Si, por el contrario, estamos en una carrera y perdemos puestos por cualquier causa, la barra de emoción también se puede 'canjear' por un impulso turbo que consume dicha barra. Esto nos dará un toque estratégico para momentos específicos, y al mismo tiempo una ventaja de segundos en carreras reñidas. Con ello, se completa un diseño de desarrollo creemos que bastante original y lleno de posibilidades. Posibilidades que, por otro lado, no se han completado de forma total.

Y es que en ocasiones no será necesario hacer movimientos para ganar. Simplemente bastará con centrarse en correr y no cometer fallos. Esto le resta profundidad a la curva de dificultad del juego, alta por otra parte en las fases más avanzadas. Quizás sea este su mayor fallo, aunque se hace algo repetitivo a medio-largo plazo. Sin embargo, su gran modo on-line para 16 jugadores será exprimido de forma total por todos los usuarios que se hagan con él, ya que el sistema es robusto y es muy divertido.

Los modos de juego no presentan ninguna novedad o modo original. Todas las competiciones se centran en tres tipos distintos: Carrera, Sprint y Estilo Libre. Las Carreras son las clásicas competiciones con velocidad y muchos saltos, y será el principal modo de juego. Los Sprint se desarrollarán en circuitos más pequeños y con pocos saltos, con lo que serán luchas más veloces y donde aprovechar el turbo de cada salto será esencial para llegar a la última vuelta con opciones.

El Estilo Libre requiere pericia en los saltos, y puede ser el modo de juego que más dificultad entrañe. Encadenar movimientos es primordial, así como hacerse con los ítems que están diseminados por los circuitos (puntuación X2, movimiento especial, etc) en los saltos. El combustible será esencial para seguir corriendo y conseguir más puntos, así que necesitamos recogerlo del mismo modo que los demás ítems (cuidado, porque también hay ítems que nos hacen gastar la gasolina el doble de rápido).

Tendremos el modo 'Tour Mundial', con diez fases con entre 4 y 7 pruebas en cada uno, y necesitaremos llegar a un límite mínimo de puntos para pasar al siguiente. El modo 'Prueba Unica' nos permite configurar el tipo de prueba que queramos como queramos. Tendremos el modo 'Prueba' para entrenar y campar a nuestras anchas sin el incordio de los demás pilotos en las pistas desbloqueadas. Finalmente, el modo On-line, que será como hemos dicho antes, uno de los más divertidos y jugados.

Tenemos que destacar que el juego nos 'obliga' a construir nuestro propio ATV para el modo Tour Mundial, con lo cual tendremos que montar las piezas según sus características y según el modo de juego en el que vayamos a participar (el modo Sprint nos obliga a tener un Quad con gran aceleración y velocidad, pero menos valor para los movimientos especiales, el modo Tour Mundial uno equilibrado, etc...). Podremos darle color, añadir skins y pegatinas de marcas. Asimismo, al ganar pruebas en el modo Tour Mundial ganaremos espacio para crear más y más quads personalizados.

Destacar en último lugar el buen diseño de los circuitos, muy bien pensados para sacarle todo el jugo posible a cada objetivo. Grandes y escarpadas montañas, con multitud de caminos que seguir (algunos son atajos, otros son justo al contrario, hay que aprendérselos) y sobre todo llenos de posibilidades. La física de los ATV está muy bien diseñada, y aunque no es realista en demasía, se comporta de forma coherente en todo momento dentro de su concepto de velocidad y control. Un gran trabajo en este sentido.

Los protagonistas del juego no tienen mayor importancia que la que se le quiera dar, ya que no poseen características en la conducción propias, y simplemente nos sirven para identificarnos con el piloto. Podremos cambiar el color del casco o su diseño de vestuario, pero viene a ser uno de los detalles menos reseñables del juego. En este caso se le ha añadido muy poca personalización por parte del usuario.

En resumen, la jugabilidad de PURE está llena de detalles originales, y su concepto de desarrollo por carrera individual para los movimientos nos ha gustado. Lástima que en ocasiones no hagan falta, y que sea bastante sencillo de completar hasta la mitad del juego. Por todo lo demás, logra un equilibrio muy robusto y un modo on-line que puede ser la risa con los/as amigos/as.

C o n c l u s i o n  .-
PURE se puede considerar como un gran juego con alguna laguna que le resta un mayor valor global. Técnicamente irreprochable en ningún apartado, luce espectacular, suave y lleno de detalle en cualquier momento. Los escenarios son grandes y con varios segmentos a seguir, las físicas son arcade y enganchan al jugador desde el primer momento. Lástima de alguna cámara más para seguir la acción y unos replays a la altura. En cuanto a jugabilidad, es tan original como limitado sin quererlo. El sistema de progreso en los movimientos de salto es llamativo, intuitivo y divertido, pero no es imprescindible. Podemos ganar carreras sin tener que utilizar ni uno solo, lo cual no es un buen dato.

Los modos de juego se resumen en tres: Carrera, Sprint y Estilo libre. Este escueto listado lastra sus posibilidades con más opciones. Asimismo, quizás la ausencia de otros tipos de vehículos podría hacer que el cansancio hiciese mella en el usuario antes de tiempo. La dificultad no es muy alta, y lo mejor de todo es el modo multiplayer on-line para 16 jugadores, un festín de diversión, risas y piques asegurados. PURE es un muy buen juego, pero no un grandísimo juego. Le faltan algunos detalles en su mecánica y en su curva de dificultad para hacerlo totalmente imprescindible. Aún así, los que quieran diversión directa y espectacular todoterreno, este es su título.

L o   m e j o r  .-
- Gráficamente brillante
- Jugabilidad bien diseñada
- Multijugador robusto y sin fallos
- Diseño de pistas inteligente
- Poder diseñar nuestros propios ATV

L o   p e o r  .-
- IA mejorable
- Falla en su propio núcleo de jugabilidad
- Falta multijugador en 1 consola