Gaming Club
Regístrate
españaESPAÑAméxicoMÉXICOusaUSA
El Tesoro de Isla Alchachofa

El Tesoro de Isla Alchachofa

El Tesoro de Isla Alchachofa, Guía completa

Jim, un joven ladronzuelo, quiere encontrar el tesoro del pirata Frink, que está escondido en la legendaria "Isla Alcachofa".

Actualizado a

GUÍA EL TESORO DE LA ISLA ALCACHOFA

Poco podemos describir del maloliente lugar en que nos hallamos: baste decir que la omnipresente penumbra sólo es violada por la débil luz proveniente de siete velas encendidas. Gracias a tan escasa iluminación, apenas si percibimos el contorno sinuoso y curvilíneo de alguna belleza femenina de ampulosas y generosas formas, con una cabellera pelirroja exuberante y labios rojos como el fuego.

A su lado, una perfil horrible e indescriptible, cuyos horribles caracteres faciales quedan, afortunadamente, cubiertos por el misericordioso velo de las tinieblas... y aún así, esos rasgos crueles y esas gafas sucias sólo pueden corresponder al maligno ente conocido entre los meros mortales como El Bárbaro...

"Tus ojos azul cobalto son como dos lagunas sin fondo en las que mi cordura se ahogaría, ya que no me canso de tu mirada empalagosa como la miel..." recita, probablemente de memoria, el malvado Bárbaro, aunque la chica parece no inmutarse ni por sus edulcoradas palabras ni por su halitosis galopante.

"¡¡Su Excelencia tiene correo!" brama en ese momento estruendosamente el sistema de doce altavoces conectados a un mísero Athlon 600, invocados por el programa de correo al recibir algún mensaje. Tanto decibelio soltado de sopetón provoca que el acaramelado Bárbaro pierda el control de sus manos durante unas décimas de segundo [menudo susto del carajo] lo que provoca que sus sucias uñas toquen el brazo de la pobre chica. Las consecuencias de tal acción son del todo punto sorprendentes.

Para empezar, se oye una sonora explosión, parecida a la de un neumático estallando por el exceso de presión; acto seguido, un sonoro bufido indica la salida a presión por algún orificio recién estrenado de aire u otro fluido gaseoso, escapando a alta velocidad de su contenedor; por otro lado, la chica a la cual El Bárbaro estaba cortejando empieza a menguar rápidamente, y no sólo eso, sino que además empieza a levitar, a volar de un lado a otra de la oscura cámara, hasta escapar ruidosamente por una ventana entreabierta, emitiendo un sonido que, si bien en un principio era bastante agudo, en estos momentos recuerda la flatulencia de una vaca holandesa.

Por fortuna, la expresión de El Bárbaro queda, de nuevo, oculta a los ojos del espectador por la oscuridad estigia reinante, ahora incrementada debido a que cinco de las siete velas se han apagado por los gases escapados de la huidiza compañera ¿sentimental? de tan despreciable ser. "Tengo menos suerte que Quasimodo o el Fantasma de la Ópera..." se le oye mascullar mientras descarga su rabia contra un inocente cojín en el que antes apoyaba sus posaderas la fugitiva belleza... aunque curiosamente el susodicho cojín estaba frío como el hielo.

Acto seguido, El Bárbaro consulta su programa de correo para saber qué diablos [y otras maldiciones y juramentos en arameo] dice el mensaje que ha recibido... PepMeister le ha encargado una nueva misión... Solucionar [ya mismo para anteayer lo quiero] un nuevo juego de aventuras... gráficas y todo, oiga...

Normas

En estos momentos no se puede comentar, estamos trabajando en la mejora de este servicio.