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Blade Runner

Blade Runner

Blade Runner - Sobre los otros replicantes

La caza de replicantes es tu profesión, pero nunca te habías planteado que pudieras estar matando a "personas".

SOBRE LOS OTROS REPLICANTES

Zuben siempre es replicante, pero pueden ocurrir varias cosas con él. Si no esquivamos la olla, cuando nos la tira en la cocina, no le alcanzaremos, y cuando volvamos a nuestro apartamento nos atacará y habrá que matarle. Si la esquivamos como expliqué, le alcanzaremos y podemos retirarle o guardar la pistola, dejándole así vivir.

Lucy puede ser replicante, y en tal caso, cuando vamos tras ella en el laberinto podemos alcanzarla de la siguiente forma: Al entrar corremos hacia el fondo pegados a la izquierda hasta que ella se mueve, entonces vamos a donde ella estaba y desde allí corremos hasta cerca de donde esta ahora Lucy, hasta un lugar tras una pared con 3 asientos rojos. En este punto la alcanzamos. Si vamos desarmados podemos hablar con ella y salvarla, si llevamos la pistola en la mano podemos matarla o dejarla salir por la derecha y la retirará Crystal.

Dektora es otra candidata a Replicante. Si lo es se irá corriendo y la tendremos que seguir. Al salir del camerino, en la zona del escenario donde ella actúa, entramos por una puerta que hay al fondo, después a la derecha llegamos a un proyector que nos deslumbra y lo apagamos de un tiro. Subimos una escalera hasta llegar a otra habitación, Si vamos desarmados la encontraremos a la izquierda y tras hablar con ella huirá y sobrevivirá. Si vamos armados disparamos a las paredes hasta que aparezca y la podemos matar.

Los gemelos son replicantes, y como tales podemos retirarles. Si lo hacemos antes de que nos den los documentos que implican a Guzza, estos se encontrarán en los monitores de la derecha.

Sadik resulta ser humano, es amigo de los replicantes.

El encuentro final con Clovis en el autobús lunar puede ser de dos formas, como amigos o como enemigos. En este último caso lo encontramos tumbado y moribundo. Podemos matarle o irnos y dejarle que muera el solo, el resultado es el mismo. Si esperamos a que acabe la poesía que está leyendo le veremos expirar.