Inmisericorde revancha de Coello y Tapia ante Chingotto y Galán
Los remates infalibles del argentino contagiaron al vallisoletano. Los vencedores venían de ser superados con claridad en Roma y en Génova.
De las últimas nueve finales masculinas, ocho las han protagonizado Coello y Tapia (fallaron en Sevilla) y Chingotto y Galán. Con la victoria de hoy los segundos, números uno, igualan a cuatro los títulos a los primeros, aunque en duelos directos aún Chingotto y Galán llevan una victoria de diferencia (en Sevilla, semifinales).
A Málaga llegaban Chingotto y Galán tras dos triunfos apabullantes en Italia, en Roma y en Génova, especialmente el último (doble 6-1), que había tocado en la moral a Coello y Tapia, porque ha sido una semana dura para ellos por el sentir de los aficionados, lanzados a criticar a los mejores de 2023.
No lo han explicado, pero se intuía. Ha sido una semana entera pensando en este partido. Daba igual el rival: lo que Coello y Tapia visualizaban en cada encuentro del P1 de Málaga es que enfrente estaban Chingotto y Galán. El plan era evitar caer en los zarpazos de Galán o en el dominio en la red de Chingotto. “Tuvimos una charla Coello, Prato (el entrenador) y yo el lunes”, comentaba Tapia al final del partido. Y la charla ha resultado efectiva.
Los globos al adelantado Tapia tenían una respuesta letal, porque este volaba, y desde más allá de los siete metros se traía la pelota, lo que resultaba incontestable por parte de los saltos de Galán, que no podía llegar tan arriba. Uno, dos, tres... El argentino volvía a recuperar la confianza, a ser el gran Agus, el que esta vez dominaba en su cruzado a un Galán más activo pero menos efectivo que otras veces: 6-2 en el primer set.
En la segunda manga parecía que Chingotto y Galán reaccionaban, pero mediado el parcial, 3-3, se destacó definitivamente Arturo Coello: el vallisoletano se cruzó en la red, remató con la volea como solo hace él, y si le tiraban globos, también los pinchaba. Es decir, la pareja estaba como en sus mejores partidos, con la necesidad de la victoria, dolidos y espoleados por lo que había sucedido en Italia. El próximo enfrentamiento tendrá que esperar: ninguna de las dos parejas se ha inscrito en Finlandia, con lo que el torneo finés queda muy abierto para los que les persiguen.