ATLETISMO | FÁTIMA DIAME VISITA AS
“¿Medalla en París? Habrá que saltar 7 metros... y sé que puedo”
Fátima Diame visita AS con el bronce mundial indoor de longitud, y ahora mira a los Juegos Olímpicos: “Este metal me da mucha confianza, puedo pelear de igual a igual con todas”.
Fátima Diame Diame (Valencia, 27 años) se colgó la medalla de bronce de longitud en los Mundiales indoor de Glasgow. Un éxito que llevaba muchos años persiguiendo y por el que todos los expertos apostaban. Faltaban el cuándo y el dónde. La portentosa especialista del salto horizontal visita AS para reafirmar su convicción de que este éxito es un punto de inflexión en su carrera y que a partir de ahora su firme convicción es seguir sumando metales internacionales. Eso sí, Diame es realista: “En París habrá que saltar 7 metros para tener opción de medalla olímpica. Sé que puedo estar ahí”.
La pupila de Pedroso en esa especia de aldea gala de Astérix y Obélix de ‘voladores del foso’ que el cubano de 51 años, nueve veces campeón mundial y una olímpica, ha creado en Guadalajara es el lugar al que Fátima llegó a finales de 2021 tras estar a las órdenes de Rafa Blanquer en su Valencia natal. “Iván me ha hecho ver que no tengo nada que envidiar a mis rivales. Es una persona muy metódica con la técnica. En todo: carrera, batida, salto, aterrizaje... y es en la técnica donde más hincapié hace. Es muy exigente y concienzudo en el entrenamiento, pero fuera es un amigo más. Blanquer también me ayudó mucho, pero estaba un poco estancada e ir a Guadalajara fue salir de mi zona de confort. El equipo que hemos formado allí es una pequeña familia. Además, entrenar con saltadores de tantísimo nivel te sirve de motivación. Te exiges más en cada sesión”, afirma.
Miembro con honores de la élite, Diame relata cómo fueron sus inicios en el atletismo: “Empecé porque tenía que hacer dos extraescolares: inglés y un deporte. Un día paseando con mis padres vi que en las pistas de atletismo cerca de mi casa había muchos niños y me apuntaron. Al principio hacía de todo, y luego me centré en la velocidad, las vallas y la longitud”. Pronto coincidió con Niurka Montalvo, que entrenaba en Valencia con Blanquer y la plusmarquista nacional (7,06) anticipó un futuro que cada vez parece más cerca de cumplirse: “Me dijo: ‘Tú me quitarás el récord de España’. Ojalá tenga razón”.
Los 7 metros son una barrera mágica para estar en el club de las elegidas. Capacidad, talento y potencial tiene para alcanzarlo. ¿Qué falta para plasmarlo? “La clave para seguir mejorando es el trabajo, no hay más. Iván lo repite siempre y planifica continuamente cómo mejorar. Confía mucho en mí. Cuando se certificó el bronce de Glasgow me dijo: ‘¿Ves como puedes? Ahora a celebrarlo”. Una colaboración que avanza por buen camino y al que el metal mundial da un fuerte empujón: “Es cierto que siempre he hecho bastantes nulos, pero ahora los no nulos han subido mucho en regularidad y en marcas cerca de mis mejores. Hemos mejorado mucho los talonamientos y ahora soy más regular en mis saltos. Esta medalla me da mucha confianza. Me hace pensar: ‘Puedes pelear de igual a igual con todas’. No me intimidan mis rivales, no veo a ninguna muy superior a mí. Y así afrontaré todas las competiciones que vienen”.
Fátima desvela cómo fue el instante previo a ese quinto salto de 6,78 que le dio el bronce en Glasgow: “Empecé bien, pero luego estaba yendo incómoda a la tabla. Antes del quinto, Iván me dijo: ‘Corre’. Lo pensé y me di cuenta de que no estaba explotando la base de mi salto que es la carrera. Y salió el 6,78. Estaba muy contenta, pero tenía que esperar. No quería desconcentrarme ni ilusionarme demasiado. Ese intento me ponía en el podio, pero el bronce aún no era seguro. Por eso no tuve una explosión de alegría”.
Por delante, en 2024 hay Europeos y Juegos, dos citas muy ilusionantes: “El indoor es una preparación para el aire libre. Por eso haber hecho 6,78, a cuatro centímetros de mi mejor salto me da mucha motivación. Intentaré estar en Roma y en París lo más arriba posible. Además, siento París como mis primeros Juegos porque Tokio fueron sin gente y los sentí como incompletos”. Mientras, Fátima seguirá entrenando duro tras parar “una semana, necesitaba descansar”. Un trabajo que no modifica ya sea pista cubierta o aire libre: “Yo entreno con la carrera completa. Siempre 18 apoyos”. Y junto a ella en las pistas de Fuente de la Niña, la reina del triple... que podría ser su rival en París si dobla prueba, como es su idea. “De momento gano a Yulimar 1-0 en longitud. Le derroté en Mónaco (risas)”, dice Diame antes de revelar en qué no tiene rival la venezolana: “El altavoz de Yuli no sé qué tiene, se oye siempre más alto que el de los demás”.
ESTRELLA DE LAS REDES SOCIALES
Fátima Diame, además de una joya del pasillo de la longitud triunfa en redes ya que es la deportista española, fuera del fútbol, con más seguidores en Instagram: 507.000. Y dentro del balompié sólo le superan Alexia Putellas (3,3 millones), Aitana Bonmatí (1,5) y Jenni Hermoso (1,1). Reconocimiento en forma de homenaje que también le llegará en su ciudad natal en el partido de Liga del 30 de marzo entre el Valencia y el Mallorca en Mestalla. Antes, será una de las invitadas VIP de la mascletá del Ayuntamiento, el penúltimo día de Fallas.