Haney, en casa del enemigo

Devin Haney (27-0, 15 KO) tiene todo para acabar con su historia en Hollywood. Empezó a boxear con siete años como 'receta' al TDH que sufría. Su padre, y entrenador, le vio potencial y siendo un adolescente su mudaron a Las Vegas. Entrenó con Roger Mayweather y tuvo a Floyd como mentor. Tenía calidad para ir a los Juegos de Río en 2016, pero tenía 16 años y al ser menor no podía acudir. Sin dudarlo decidió debutar de profesional. Fue su propio promotor y hasta que cumplió 18 boxeó en México (en Estados Unidos para pelear en el campo rentado hay que tener más de 18). Su historia da para una película casi sin empezar.

Fuera de lo extradeportivo, en el ring ha tenido pasos muy medidos. Eddie Hearn le echó el ojo en cuanto comenzó a despuntar y le ató. Ahora, con 23 años debe dar un paso al frente. Es cinco veces campeón mundial WBC (una interino), pero su cinturón siempre ha estado discutido por los puristas. El WBC tenía un campeón absoluto con el apodo 'Franquicia'. Lo era Lomachenko, pasó a serlo Teófimo y ahora el hombre franquicia es George Kambosos (20-0, 10 KO). El australiano, de 29 años, es junto con Jojo Díaz, al que ganó en diciembre, el examen más complicado que ha tenido. En su debe, más allá de datos, están las sensaciones. Haney promete mucho, pero un estilo demasiado conformista hace que no convenza.

El Kambosos vs Haney es muy atractivo por muchos motivos. El australiano se ha labrado una gran carrera en su país, salió cuando se le quedaba pequeño, se confirmó en Reino Unido y dio el golpe sobre la mesa el pasado noviembre ganando a Teófimo López. Ahora vuelve a casa como rey y con un gran apoyo. Es valiente y mete ritmo. Eso gusta al público. Por el otro lado, la actitud de Haney es la gran incógnita. Por primera vez es la cara b: visitante y aspirante, debe de arriesgar para ganar. Tiene mucha calidad, pero o la acompaña de valentía o tendrá su primer tropiezo. Con Lomachenko, plan A de Kambosos, fuera de juego, el trono del ligero se le acerca a Haney... pero tiene más cosas en liza. El cartel de superestrella cuelga del Marvel Stadium de Melbourne, está en su mano atraparlo.