Haney cumple sin convencer: gana a Díaz y reta a Kambosos
Devin Haney retuvo el Mundial WBC del peso ligero al imponerse, por decisión unánime, a Joseph Díaz en Las Vegas. Al acabar retó a George Kambosos.
Devin Haney abandonó San Francisco cuando era un niño y se instaló en Las Vegas. Su padre le vio potencial como boxear y sabía que el mejor sitio para que creciese era 'La Ciudad del Pecado'. Años después de ese cambio de vida, Haney estelarizó un pleito en el MGM Grand. Era su sueño, pero recibió abucheos del que tendría que ser su público. Los fans apoyaron a su rival, Joseph 'Jojo' Díaz. Una pena para él. Era el día indicado para cambiar la percepción que siempre deja... pero de nuevo quedó a deber. Haney derrotó a Díaz por decisión unánime (117-111, 117-111 y 116-112) para retener el Mundial WBC del peso ligero. Un paso más, pero se le vieron las costuras. Otra vez. A sus 23 años el camino por recorrer todavía es amplio. No deben correr con él.
Haney se gustó de inicio. Jojo le 'entregó' los dos primeros asaltos. Díaz se quedó muy tranquilo, intentando ver lo que traía su oponente. Devin lo aprovechó para mandar con el jab y empezar a sacar muchos golpes a la zona de flotación. 'Easy work', pero en el tercero el ritmo cambió. Jojo apretó y le incomodó. El aspirante (llegaba como campeón interino, pero a efectos del título en juego era retador) parecía estar lastrado en sus piernas. Podía ser un gran debe, pero no necesitó estar al 100% para encerrar a Haney. 'The Dream' se iba metiendo él solo contra las esquinas y ahí sufría.
Díaz apretaba, conectaba manos duras, muy duras, pero en el cómputo general no le servía. Iba contra el campeón y encajaba muchos golpes. Haney, aunque no estuvo cómodo, era preciso y lograba meter sus combinaciones para decantar la mayoría de los asaltos. ¿Qué le faltó en una victoria amplia a los puntos? Mucho. Cuando le empezaron a llegar golpes no lo pasó bien, no supo crear espacios ante un rival aparentemente mermado, tampoco aprovechó su envergadura y algo debería de preocuparle: su pegada no frenó nunca a Díaz (quien pecó de precipitación y continuidad en algunas ocasiones), quien recibió puñetazos, pero nunca titubeó. Pese a todo, el plan lo sacó adelante y al terminar ejecutó la última parte. Retó a George Kambosos, quien estuvo de comentarista en DAZN, para "una unificación real". Eddie Hearn, su promotor, había dicho que al púgil no le importaría ir a Australia. Quizá el órdago sea más grande visto lo visto, pero Haney lo quiere.