El Sporting firma un amargo pase a la final por expulsión de Pany

Cinco finales en los últimos seis años. Es el impresionante bagaje que suma ya el Sporting CP en la Champions League de fútbol sala tras batir en la primera final que acogió este viernes el Arena Riga (Letonia) al ACCS París de Ricardinho. El equipo francés, a pesar de caer con cierta dignidad, pagó los platos rotos de su debut en esta Final Four ante el vigente campeón, que tiró de pegada para resolver el partido con mucha claridad (2-6) con goles de Esteban, Tomas Paço, Cavinato, Cardinal y Merlim (por partida doble).

Pero no todo fueron buenas noticias para el conjunto portugués, porque su billete a la gran final lleva sabor agridulce. Pany Varela, una de las grandes referencias del Sporting, se pierde el partido por el título al ver una roja directa incomprensible, sobre todo tratándose de un jugador de su nivel (campeón de Europa y del mundo con Portugal). Tras una pérdida, Pany propinó un manotazo en la cara a uno de los jugadores del conjunto francés sin balón de por medio, por lo que los colegiados no dudaron al mostrarle el camino de los vestuarios.

El partido cumplió el guión esperado, con los rendimientos de ambos equipos muy dispares. No en vano, el ACCS ha competido este año en la segunda división francesa, mientras que al otro lado del 40x20 estaba el rey de Europa. El Sporting salió a morder, con una presión alta que ocasionó muchos problemas a los franceses en la salida de balón. El 0-1 llegó con algo de fortuna, después de un disparo de Erick que desvió totalmente Esteban de forma involuntaria para despistar al guardameta. Las costuras se le vieron a la escuadra de Ricardinho poco después al encajar un tanto de cabeza de Paço en un córner, una acción poco habitual en este deporte. Con poco más de cinco minutos de la primera mitad transcurridos y dos goles de desventaja, el conjunto parisino no se lo pensó: portero-jugador en pista. El panorama no mejoró...

Zicky Té, que firmó una gran actuación como asistente, le entregó el 0-3 en bandeja a Merlim, minutos antes de que Pany Varela fuese expulsado y de que el ACCS recortase distancias con un trallazo de Lutin aprovechando la superioridad numérica en pista. En la segunda mitad, los errores del equipo francés echaron por tierra la remota opción de remontada. En el 25', una pérdida de balón la aprovechó Zicky, el más listo de la clase, para regalarle el gol a Cavinato a puerta vacía. Fue la sentencia. El intercamibio de goles entre Galmim y Merlim mantuvo los tres goles de diferencia hasta que, en el 33', Cardinal puso la guinda desde el punto de penalti. Benfica o Barça ya saben que se medirán con el vigente campeón, eso sí, sin Pany Varela.