Kattar, Chikadze y unos 'fuegos artificiales' para iniciar el año

Los fines de semana en enero tienen tres letras grabadas a fuego para los aficionados del deporte en Estados Unidos: NFL. Los playoffs del football son los que se llevan todos los titulares, por ello el resto de competiciones saben que no deben quemar las naves. Los primeros que lo saben están en las oficinas de UFC, que han organizado un enero con solo dos eventos para no gastar combates que puedan darle mucho en el futuro. La próxima semana organizan un PPV que puede hacer sombra a cualquier cosa, pero el segundo evento en discordia dista mucho. Por ello, el UFC Las Vegas 46 tiene un potente combate estelar, pero un acompañamiento más discreto para lo que suele ofertar esta compañía. Toca competir con la ronda de Wild Card de la NFL.

No hay problema por esos previos, y es que el estelar que han fijado reclama la atención de cualquiera. La premisa es clara: un pleito llamativo. Por ello han llamado a dos strikers que pueden ofrecerte un KO viral o una guerra de 25 minutos sin cuartel. Calvin Kattar y Giga Chikadze se juegan mucho más que visualizaciones. Alexander Volkanovski se quedó sin rival para el UFC 272 (5 de marzo) y finalmente pelará en el UFC 273 (9 de abril) ante The Korean Zombie. La opción de disputar el título ya se desvanece para el ganador, o no... quizá la UFC guarde al ganador en la recámara ante cualquier eventualidad. Por tanto, es un combate entre buenos ranqueados del pluma (5 y 8), que van a dar espectáculo y que puede generar mucho hype para el futuro.

Fuera de todo lo que envuelve el combate, dentro de la jaula se espera un pleito muy igualado. Kattar, de 33 años, está acostumbrado a los grandes rivales. Viene de perder contra Holloway hace justo un año, pero antes había ganado a Dan Ige y Jeremy Stephens. Por su parte, Chikadze, también de 33 años, está ante su combate más importante. La frase no le es nueva, ya que le sucedió lo mismo en agosto de 2021 y noqueó a Barboza. Viene con una racha de nueve victorias, en UFC está invicto en siete pleitos y a sus tres últimos rivales (Simmons, Swanson y Barboza) los ha noqueado. Además, está ante su segundo estelar. Los posibles nervios por la importancia del pleito no son un factor importante. Ese rodaje y venir con un gran currículum hacen que el georgiano parta ligeramente como favorito. Además, en una previsible pelea en pie (Kattar a ganado el 50% de sus pleitos por KO y Chikadze el 64%) su gran experiencia en el kickboxing podría ser clave. Pese a ello, se espera un duelo igualado porque enfrente tendrá poder y experiencia, y es que no es la primera guerra en la que Kattar se embarca. Ahí están sus posibilidades, sacar su veteranía en combates importantes e ir sumando golpes a su favor. Gane uno u otro, los fuegos de artificio están listo para explotar este sábado en Las Vegas.