Pellegrini, el adiós de la Divina
La nadadora se despidió esta semana con otro título italiano y después de una carrera de 18 años con 57 medallas internacional y una plusmarca en vigor.
La natación despidió el martes, con todos los honores que merece, a una de las deportistas más icónicas de las dos últimas décadas, a la altura en Italia de otros mitos como Valentino Rossi, Paolo Maldini o Fausto Coppi, cuyo legado marcará a una generación. Federica Pellegrini deja la competición a los 33 años, pero seguirá ligada al deporte. Cambiará el bañador por el traje, los récords y las medallas por la organización federativa. Compaginará su cargo en el Comité Olímpico Internacional con el impulso que le seguirá dando a la International Swimming League y a la Federación Italiana.
La ‘Leona de Verona’ se adjudicó su 31º campeonato italiano de 200 libre en el Nacional de piscina corta, su última carrera, para en total sumar 130 títulos de su país. El palmarés de Pellegrini comprende un oro y una plata olímpica, conseguidos en 2004 y en 2008, señal de su trayectoria prolongada en el tiempo y precoz. En los Juegos de Tokio, Pellegrini repitió final olímpico en los 200 libre. Finalizó en séptima posición. “Lo que ha hecho a su edad es espectacular”, Michael Phelps de ella.
“Creo que los días posteriores serán tranquilos, pero luego llegará la melancolía. Me levantaré y no podré preparar la bolsa para ir a la piscina”, dijo la Divina. El mejor recuerdo de Pellegirni, que se despidió con poco público debido a las restricciones por la COVID en su país, es el Mundial de Roma de 2009, cuando consiguió ser la primera mujer en bajar de cuatro minutos en los 400 libre.
La despedida de Pellegrini fue emotiva. Después de ganar el título y ser ovacionada en la piscina, le aguardaba una sorpresa. Sus rivales internacionales en los últimos años viajaron a Italia para nadar un 200 libre diferente. Todas acompañaron a Pellegrini por la calle 4, como la corte que sigue a su reina. No faltaron Sarah Sjöstrom, Femke Heemskerk, Camelia Potec, Sara Isakovic, Evelyn Verraszto y Alice Mizzau.
Pellegrini deja atrás 57 medallas internacionales entre Europeos, Mundiales y Juegos, y el récord del mundo de 200 libre que todavía no han podido batir ni Sarah Sjöstrom, ni Katie Ledecky ni el fenómeno australiano Ariarne Titmus. La italiana deja de nadar pero sobreviven sus récords y su legado, una huella que permanece en una generación italiana que se ha colocado entre los mejores países del mundo.