Sergio García enseña los dientes el primer día en Jumeirah

En ausencia de, Jon Rahm, firme candidato a ganar el European Tour (desde 2022 DP World Tour) por segunda vez, Sergio García da alas al golf español en la final del circuito, que arrancó este jueves en el Jumeirah Golf Estates de Dubái (Emiratos Árabes). El de Borriol empezó con un muy buen -4 que le deja en la quinta plaza, a tres del norirlandés McIlroy, líder con -7, y empatado con el estadounidense Morikawa, que comanda la Race.

Fue una primera toma de contacto de Sergio con el Earth Course, diseñado por Greg Norman, muy sólida. Falló pocas calles, aunque esos errores le acabaron costando bogeys, dos en toda la jornada (al 7, par 5, y al 9), y estuvo bien en los greenes, embocando putts de media distancia en el 5 y el 11. Sacó seis birdies que invitan a pensar en un gran resultado del castellonense, al que hasta ahora siempre se le ha resistido Jumeirah pese a firmar buenas actuaciones allí.

La baja del número uno mundial Rahm, que pese a su renuncia conservará el trono del ranking al menos lo que queda de año, para descansar y pasar más tiempo con su familia tras una temporada extenuante, coloca a García como la principal baza de victoria española.

Pero también puede tener algo que decir el canario Cabrera Bello, ganador del Open de España el pasado octubre que completó la vuelta inicial con -2 (cuatro birdies y dos bogeys), capeando el temporal en un día en el que no anduvo especialmente fino. Son cinco golpes de distancia con la cabeza, nada que no se pueda recuperar. Por detrás marcha el barcelonés Adri Arnaus, el último producto nacional que entró en el corte para esta final. Una vuelta errática, con tres birdies y seis bogeys, le dejó penúltimo en +3.