MVP salva in extremis a Bobby Lashley y le cuesta el título a Drew McIntyre en Hell in a Cell
Bobby Lashley y Rhea Ripley retuvieron sus títulos en el WWE Hell in a Cell, pero lo hicieron con polémica. Bianca Belair se consagró ante Bayley.
La cara de Drew McIntyre era todo un poema al acabar Hell in a Cell. La opción más improbable en una combate dentro de una jaula de acero sucedió y le dejó sin Campeoanto de la WWE y sin opción de volver a enfrentarse al campeón, Bobby Lashley. El escocés mostró su visión más agresiva. Golpeó con todo lo que encontró a Lashley, quien lo pasó realmente mal. Tuvo sus momentos, pero sufrió mucho más tiempo del que dominó. Todo cambió cuando por accidente, Drew golpeó al árbitro. Tuvo que entrar otro de recambio y MVP se coló. Primero salvó una cuenta que tenía hecha el aspirante. Después provocó que Lashley tuviese su oportunidad, pero McIntyre le estampó de espaldas contra una mesa, y por último, cuando el escocés preparaba la Claymore final le agarró del pie. El campeón le hizo un paquetito y ganó. Injusto. Demasiado. Habrá que ver si la promesa se cumple o alguien hace justicia. McIntyre lo merece.
La otra pelea que tuvo la jaula de acero como protagonista fue también una guerra absoluta. Bianca Belair se consagró. Fue campeona en WrestleMania 37 ante Sasha Banks y en Hell in a Cell, ante Bayley, le ganó en una estipulación que nunca antes había disputado. La pelea fue tremenda. Ambas subieron un escalón más en su rivalidad. Golpes tremendos, con todo... y aprovechando cualquier factor. Bayley intentó atrapar a Belair con su propio pelo, pero al final Bianca lo rentabilizó haciendo que sirviesen de esposas. La campeona demostró que no es flor de un día con muchas acciones duras, pero sobre todo con la que puso punto final al pleito. Voló sobre la aspirante, falló, pero se rehizo y aprovechó una escalera que había en el ring para primero ablandar a Bayley y luego rematarla al lanzarla contra esa estructura.
El último título de la noche (el Reigns vs Rey Mysterio se adelantó a SmackDown del viernes) se quedó en manos de la campeona femenina de Raw, Rhea Ripley, aunque lo hizo con polémica. Charlotte Flair ganó el combate por descalificación y es que Ripley acabó desquiciada y atacó a la aspirante con parte de la mesa de comentaristas. La 'Reina' quería su decimocuarto reinado. Lleva semanas con esa fijación y se notó. Tienen gran calidad y no cometió fallos. Ripley se tuvo que emplear a fondo y así logró que el combate fuese de muchos quilates. Flair tuvo las mejores opciones, pero también sufrió y de hecho una vez se salvó porque puso su pie sobre la cuerda. Pese a ello, parecía un puntito por encima cuando recibió el golpe ilegal. Queda mucha historia por delante entre ellas.
Fuera de pleitos, Seth Rollins ganó a Cesaro en un auténtico combatazo. El suizo cayó, pero dio una paliza tremenda al 'Messiah'. De hecho, tenía todo de cara, pero un paquetito de Rollins cambió el devenir del combate. Él se queda tranquilo porque tiene su "revancha" y Cesaro se quedó muy enfadado. Un paso más en su rivalidad. Mientras, Sami Zayn se aprovechó que Kevin Owens llegó mermado físicamente para derrotarle. Por otro lado, Alexa Bliss sigue asombrando con sus poderes. Esta vez le sirvió para ganar a Shayna Baszler... y es que en cuanto su mente cambia se convierte en una luchadora inexpugnable. Por último, en el kickoff, Natalya venció a Mandy Rose.