Alun Wyn Jones hace historia; cuchara de madera para ITalia
La Rosa se impuso en Roma con dificultades, pero sacó el bonus que le acabaría dando el título con el triunfo de Francia ante Irlanda en París (35-27).
Cosa que hizo a la postre, porque en el Francia-Irlanda, que cerró la final a tres bandas de este súper sábado, se impuso el nuevo Gallo de Galthié, pero no con el margen suficiente, 32 puntos, un mundo, para desbancar a los ingleses de la primera plaza.
Si la jornada se dividió en tres actos este, el nudo, fue áspero. Los visitantes cumplieron con lo prometido en los días previos y salieron a intimidar desde su teórica superioridad física. Pero empieza a haber más carácter en la Italia de Franco Smith, personalizado por ejemplo en el número ocho Polledri, el perejil de todas las salsas durante la primera parte, en la que le dio tiempo a firmar un ensayo (18'), participar en varias trifulcas y ver una amarilla (38'). Para los británicos ensayó Youngs y convirtió un golpe de castigo Farrell.
El 5-10 que lucía en el marcador al descanso fue el susto que necesitaban los de Eddie Jones para activarse. La segunda parte amaneció con otro posado de Youngs y un maul culminado por George en el 51' abrió brecha. El bonus lo amarró Curry en el 66', aprovechando un despiste italiano en el cerrado de un ruck. Earl, en el 72', cerró la cuenta.
Histórico Alun Wyn Jones en el fiasco de Gales
Antes, en el primer acto de la jornada, Alun Wyn Jones hizo historia. El coloso de Gales jugó ante Escocia su partido número 149 con el Puerro y superó el récord de encuentros internacionales del neozelandés Richie McCaw. Por lo demás fue un partido intrascendente a efectos clasificatorios, marcado por el viento que invadió el Parc y Scarlets de Llanelli, elegido como sede en detrimento del habitual Principality. Para qué abrir el mastodonte de Cardiff si no hay espectadores que lo llenen.