Juan Espino apunta al verano mientras la UFC vuelve a casa

Las Vegas y la UFC están muy unidas. En La ciudad del pecado se montan sus principales shows y también está la sede. Además de las oficinas, cuentan con el UFC Institute (su centro de alto rendimiento) y un pequeño pabellón, el Apex, en el que este sábado, con Tyron Woodley y Gilbert Burns en el duelo estelar, comienzan una serie de eventos a puerta cerrada. Realizar veladas en sus instalaciones era la idea primigenia, pero la Comisión Atlética de Nevada autorizó, este miércoles, la nueva normalidad tras el COVID-19.

Alguien que conoce muy bien el búnker de la UFC es el español Juan Espino. En el Apex disputó dos de los tres combates del reality de la compañía, The Ultimate Fighter, que ganó en 2018. Además, el inicio de la emergencia sanitaria le pilló en el UFC Institute recuperándose de una lesión en la mano derecha. "Fue una situación complicada. De lo que más me chocó fue ver colas de la gente comprando munición por si había falta de alimentos y se producían robos. Yo de Las Vegas me marché a Miami (donde se encuentra la central de su equipo, American Top Team). Podía haberme quedado, pero en ese momento preferí estar con mi familia en España ante lo que pudiera pasar", apunta a AS.

Espino, quien tiene un gran cartel en la UFC, está estudiando sus opciones. "En los primeros eventos ha habido muchas peleas en mi peso, ahora hay que valorar el camino a tomar", reconoce. Será breve, porque quiere regresar pronto: "Mi idea es combatir en julio o agosto. El riesgo sigue presente, pero la UFC maneja las cosas bien y no resulta más peligroso luchar que disfrutar de una terraza", añade. Le gustaría enfrentarse a Fabrício Werdum e ir a la Fight Island. "Soy un aventurero y sería una experiencia increíble. Si me llaman mañana, iría".