Woodley, a reencontrarse en el regreso de la UFC a Las Vegas

La UFC regresa a su casa, Las Vegas. La mayor promotora de MMA del mundo tiene allí su sede y el UFC Institute, en el que muchos de sus luchadores entrenan día a día. De momento, esa actividad no ha regresado a su ritmo habitual por la pandemia de coronavirus, pero este sábado recuperará los shows en la 'Ciudad del Pecado'. La prohibición de realizar eventos de deportes de contacto en Nevada fue más extensa que en otros estados, por ello, el regreso de la UFC fue en Florida. Ahora, tras la aprobación este miércoles de los dos próximos shows que tenían previstos (el sábado y el 6 de junio), la acción vuelve al Apex de Las Vegas.

En ese recinto la UFC graba sus dos reality: 'The Ultimate Fighter' y 'Dana White's Contender Series'. Está preparado para hacer una buena producción y su reducido tamaño no hará que la sensación de vacío sea tan grande como en Jacksonville (el pabellón allí tenía capacidad para más de 15.000 personas). Además, al ser suya la instalación, el coste económico baja. Hacer veladas en el Apex a puerta cerrada fue la primera opción de la UFC, la cual se vino abajo por la prohibición del Estado de Nevada. Pasado todo el proceso, el Apex y la Fight Island serán las 'casas' de la empresa durante los próximos meses.

Para celebrarlo, y como ha hecho desde su regreso, ha organizado un evento de gran calidad para este sábado. El show lo cerrarán Tyron Woodley y Gilbert Burns en un duelo muy interesante. Woodley regresa tras más de un año sin pelear. La última vez que lo hizo fue en marzo de 2019 y perdió el título welter contra Kamaru Usman. A sus 38 años, el estadounidense quiere reencontrarse para volver a mirar al nigeriano. Antes de ese tropiezo, Woodley había ganado seis de sus últimas siete peleas (la otra, empate) siendo cinco con un título en juego. Sin duda ese bagaje le hace ser favorito ante Burns, aunque es una pelea igualada.

El brasileño, de 33 años. Se presenta con una racha de cinco triunfos consecutivos y de siete en sus últimos ocho pleitos. Burns es un luchador que destaca en el suelo (47% por sumisión), pero ya demostró ante Demian Maia que también tiene pegada, ya que le noqueó en el primer asalto. Por su parte, Woodley destaca por su potencia, pero sobretodo por su wrestling. Nadie parecía poder frenar esa faceta hasta que Usman le venció. Es número uno del ranking welter, por lo que un triunfo le haría mirar de nuevo al africano. Mientras, Burns está en el puesto seis. A priori hay diferencia, pero la ilusión del brasileño será uno de los factores que Woodley tenga que controlar. Está lejos, pero un triunfo le pondría en esa carrera por el cinturón.