Tercer Tiempo, el último reto solidario del Cisneros
El equipo madrileño se junta con Restaurante Triana para repartir 200 comidas solidarias a los más necesitados en momentos de crisis. También montó una campaña de donación de sangre.
El Complutense Cisneros es un club con conciencia social y lo demuestra en tiempos de crisis por el coronavirus. El equipo colegial radicado en Madrid se ha asociado con Restaurante Triana en su última iniciativa benéfica: el Tercer Tiempo Solidario Reto 200 comidas #Covid19.
La génesis y el objetivo del mismo los explica para AS Juan Pedro Brolese, el director general: "La iniciativa surge del Restaurante Triana, que participa de la vida del club. Ellos tienen capacidad para producir unas 200 comidas al día". Estas las repartirán jugadores de los principales equipos senior, ambos en la máxima categoría del rugby español: División de Honor masculina y Liga Iberdrola femenina. Serán "unos 200 efectivos" que cambiarán el balón oval por los guantes y se dedicarán al empaquetado de las raciones y su distribución.
Se dará salida a los menús a través de Cruz Roja y Mensajeros por la Paz. "Vamos a llevar la comida a un centro que tiene la Cruz Roja para ayudar a asistir a gente con necesidades y a los del padre Ángel", cuenta Brolese. Para poder "costear los insumos" necesarios se ha habilitado un crowdfunding o sistema de micromecenazgo a través del que se pueden realizar aportaciones (en este enlace). "Va bastante bien, la gente se está involucrando y los jugadores están contentos de poder hacer esto", añade el argentino, que lleva cerca de 15 años en la estructura del club.
Las comidas, recalca, serán nutritivas y saludables. Estarán compuestas por "una bebida, una pieza de fruta y un plato fuerte". Daniel Bañón, socio fundador de Restaurante Triana, Aranda Madrid y Farándula Fearless Cocktail Bar, y su socio Roberto Correas ya venían ayudando con 25 comidas que llevan todos los días al Gregorio Marañón para el colectivo de Urgencias. Una iniciativa que todavía está activa.
Por su parte Cisneros ya fomentó la donación de sangre entre sus miembros antes de involucrase en esta idea. Tomaron parte "unas 70 personas entre socios y jugadores mayores de edad". La campaña se desarrolló a beneficio de Cruz Roja entre el 31 de marzo y el 1 de abril. Y si no participaron más miembros fue porque los requisitos para convertirse en donantes no los cumple cualquiera: "Donar sangre parece fácil pero no lo es tanto. Hay que cumplir una cantidad de condiciones.... Yo me quedé asustado", bromea Brolese.
En cuanto al nombre de la iniciativa, parte de una tradición de largo recorrido en el rugby, la del tercer tiempo, cuando jugadores de los dos equipos que disputan un partido se juntan al término del mismo para resolver disputas y estrechar lazos en torno a abundantes cantidades de comida y bebida. La colaboración con este tipo de causas de Cisneros no terminará con esto. "Seguiremos colaborando en todo lo que podamos", sentencia el director general de un club que camina hacia su 76 aniversario con su espíritu social intacto.