Irene Lozano tomó posesión como presidenta del CSD
Se fija la objetivo que el deporte "capilarice" la sociedad. Reunión con Rubiales, Blanco y el ministro con el adelanto electoral de la RFEF de fondo.
Irene Lozano (Madrid, 48 años) prometió su cargo como nueva secretaria de Estado para el Deporte y presidenta del CSD. Responsabilidad que hereda de María José Rienda, la exesquiadora que en junio del 2018 se convirtió en primera mujer al frente de la institución. “Gracias por todo el trabajo que has sacado adelante y por el que dejas para acabarlo otros y que no ha salido no por tu falta de entrega, sino por las circunstancias del calendario electoral”, alabó la política y escritora entrante (dirigía España Global) a la deportista saliente, a la que el auditorio dedicó un aplauso sentido y prolongado.
Entre el público, el presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco, que el jueves se reunió con José Manuel Rodríguez Uribes, nuevo ministro, para insistir en la necesidad de fijar un modelo para las próximas décadas. Ese 'Plan Estratégico' del que habló Pedro Sánchez en su discurso de investidura y que debe elaborar el equipo de Lozano, además de rematar con experiencia parlamentaria el anteproyecto de Ley del Deporte. Entre el público, también el presidente de la Federación de Fútbol, Luis Rubiales, con el tema candente del adelanto electoral que pretende llevar a cabo y para el que el Tribunal Administrativo del Deporte ha emitido un informe desfavorable.
Antes de arrancar el acto, Rubiales, Blanco, la flamante secretaria de Estado y el ministro se reunieron en la cafetería del CSD. De fondo, ese adelanto solicitado para trabajar la candidatura al Mundial 2030.
Entre invocaciones a Pasolini, Auster, Coetzee y Sartre de Rodríguez Uribes (“Todo lo que sé de certitud sobre la moral y las obligaciones humanas se lo debo al fútbol”, citó del escritor francés), el ministro conminó en la toma de posesión a hacer “una mejor España con este deporte magnífico que tenemos en este país”.
Lozano dejó una palabra que pretende sea el leitmotiv de su mandato “capilarización”. Que el deporte, impregne todas las capas de la sociedad: “Llevarlo a todos los ámbitos, base, universitario, femenino, de inclusión, reforzarlo como parte de los hábitos saludables”. ¿Y cómo lo hará? “Inspirándome en la ejemplaridad de los deportistas, ejemplo de ambición sana, esfuerzo y superación. Los valores del deporte deben permeabilizar la parte física y metafísica de la sociedad”. Intenciones sanas antes de bajar al barro para sacar adelante un proyecto de futuro, con una base legislativa y de financiación sólidas, para un deporte cansado de quedar siempre fuera de la agenda política.