José del Río se retira del boxeo: "Me despido satisfecho"
José del Río anuncia que se retira del boxeo tras 22 años. Fue miembro de la Selección, campeón de España y es uno de los púgiles más queridos.
Con una sonrisa y bromeando, así atiende José del Río a AS tras anunciar este miércoles, en el diario 'Última Hora Mallorca', su retirada del boxeo profesional. Los que conocen al balear, de 34 años, saben qué es una persona alegre y también hoy, tras tomar "una decisión complicada", lo es. "El anuncio era como un secreto a voces. Mi entrenador (Francisco Javier Gual ‘Canijo’) y yo hemos dicho que llegamos hasta aquí. No es por perder contra Avanesyan en la última pelea, sino porque ahora tendría que ‘empezar de cero’ para llegar a una gran oportunidad. Es mucho esfuerzo de nuevo, se echa el tiempo encima… y si empiezas a dudar es mejor dejarlo. Puede decir que entré porque quise al boxeo y que salgo de la misma manera. Es una decisión dolorosa, porque me veo bien para seguir y no ha habido una lesión, pero llegar donde quiero se me hace cuesta arriba y no quería que nadie me retirase. Hay una vida después y tras 22 años he dejado muchas cosas de lado", revela.
Su adiós llega tras disputar el ansiado Europeo del peso welter. Perdió ante David Avanesyan, pero como el repite muchas veces: "el récord es un número, lo que importa es contra quién has peleado". Y así es. Tras una etapa en la Selección olímpica, Del Río debutó como profesional en 2008 y desde el inicio "ha sido un púgil que nunca ha rechazado a nadie". "Me gustaría que me recuerde como un boxeador humilde, que ha boxeado contra todo y sin poner una pega. Los grandes acontecimientos siempre los he tenido que hacer fuera, pero nunca me ha importado", admite. Tras 11 años como profesional, se va con 29 victorias (7 por KO), 9 derrotas y un nulo, y con dos Campeonatos de España bajo el brazo. "La espinita es no haber podido ganar un Campeonato de la Unión Europea o el Europeo, pero me despido satisfecho. En este tiempo he visto como mucha gente que prometía se ha quedado frustrado sin poder llegar dónde lo hice yo", apunta.
Recordando ahora su carrera, Del Río se siente "feliz y orgulloso". "Claro que hubo momentos malos, como cuándo me noqueó Fiordigiglio (2015), que mucha gente pensaba que no volvería, pero la mayoría son recuerdos gratos. Mi debut, mi primer Nacional… o las pelea con Kerman y este último Europeo, que tuvieron una gran repercusión. En ese momento pensaba que no hacía falta estar en Las Vegas para sentirte una estrella del boxeo y ser igual de reconocido. Aunque el más especial es cuando gané el segundo Nacional contra Nabil Krissi. La gente pensaba que estaba de vuelta, había televisión, en una velada con dos Europeos y gané por KO. Eso me dio mucha fuerza para seguir hasta hoy", revela. Su retirada del boxeo profesional no supone un adiós al noble arte. Del Río regente un gimnasio en Palma (Pro Sport) junto al que hasta hoy ha sido su entrenador, y allí seguirá "disfrutando del deporte". "Ahora me centraré en el negocio y ojalá que pronto podamos sacar algún gran campeón". Por último, Del Río quiso reconocer la ayuda que ha tenido durante estos años. "Me gustaría agradecer a Francisco Javier Gual su apoyo incondicional, a Luis Emilio Ramos Roldán por enseñarme tanto sin pedirme nada a cambio y a Néstor Domínguez, por luchar desde los despachos para que tuviese oportunidades", concluye Del Río.