Las Kabuki Warriors brillan en TLC y evitan un 'Becky two belts'
Asuka y Kairi Sane retuvieron los Campeonatos por parejas ante Lynch y Flair en el estelar de TLC. Daniel Bryan reapareció y atacó a Bray Wyatt.
El WWE TLC 2019 fue capicúa. Empezó con una brillante lucha por un título por parejas y finalizó de la misma manera. New Day (Kofi Kingston y Big E) derrotaron a The Revival (Scott Dawson y Dash Wilder) para continuar como Campeones por parejas de SmackDown. Su lucha tuvo de todo: desde saltos imposibles hasta brutalidad máxima. Era la pelea de la noche hasta que las Kabuki Warriors (Asuka y Kairi Sane) y Becky Lynch & Charlotte Flair entraron en escena. TLC era el último evento del año y, sobre todo, de la década. Por ello, la WWE quiso redoblar su apuesta por el roster femenino. El 2019 siempre será recordado por ser el primer año que tres mujeres estelarizaron WrestleMania y por ello, el último gran show del año también fue cerrado por ellas.
La rivalidad entre las dos parejas femeninas fue en aumento en las dos últimas semanas. Eso provocó que la sed de venganza fuese una constante en ambos bandos, en especial en el de las aspirantes, quienes priorizaron por momentos hacer daño a ganar. No hubo un momento malo en la lucha y lo movimientos imposibles se fueron almacenando. Destaca cuándo Sane ataca a Lynch y Flair con un extintor, cuando las aspirantes se pasan a Sane de una mesa a otra, cuando Becky estuvo atada a una escalera... miles de recuerdos que ya son historia. La pelea se resolvió, precisamente por pillería. Lynch atacó a Asuka con una cuerda. La japonesa se fue fuera del ring y la irlandesa no se dio cuenta. Comenzó a ascender por los cinturones, pero acabó guillotinada al caer y el camino quedó libre para Asuka. Descolgó los cinturones y evitó que Lynch fuese de nuevo 'Becky Two Belts'. Además, fue un respaldo ante el universo de la WWE. No son campeonas por casualidad.
Los otros dos grandes momentos de la noche también venían calientes de antes. The Miz estaba muy enfadado con Bray Wyatt, quien se metió con su familia. La puso en peligro y eso se notó en la inquina del Miz, a quien poco le importó que Wyatt no fuese este domingo 'The Fiend'. Le dio una gran paliza, pero cuando a Bray se le apareció en su cabeza su demonio todo cambió. Acabó fácil con la pelea y el demonio apareció en las pantallas. Fue una estrategia de Daniel Bryan, que reapareció tras dos semanas. Lo hizo sin melena ni barba larga, pero volvió enviando un mensaje a Wyatt. Estuvo a punto de estamparle un gran mazo, pero las luces se fueron y el campeón Universal desapareció. Mención especial merecen Baron Corbin y Roman Reigns, quienes tuvieron un combate, sí, pero les supo a poco.
Corbin supo aprovechar todas sus artimañas para tener más o menos dominado a Reigns. Cuando el Big Dog reaccionó, Ziggler y The Revival aparecieron en escena para castigar a Roman. Intentó resistir, dejando un gran salto sobre todos, pero acabó sucumbiendo frente al 'King'. No les fue suficiente, porque durante los minutos posteriores continuaron con la pelea (Reings ya sí tuvo ayuda de New Day y Street Profits). Tanto fue así, que una vez que Asuka alzó los cinturones por parejas regresaron al escenario y continuaron con la trifulca, la cual finalizó con Roman Reigns partiendo a Corbin con una lanza y ambos cayendo encima de todos los implicados en la batalla campal.
También fue día de cerrar inquinas para Bobby Lashley y Rusev... o eso parece. El estadounidense se llevó la victoria, pero lo hizo con polémica, ya que Lana hizo un piquete de ojos a su exmarido y eso lo aprovechó Lashley. Quien seguro que abrieron una historia fueron los Viking Raiders (Erik e Ivar) y The O.C. (Anderson y Gallows). Los primeros lanzaron un reto abierto por los títulos. Los segundos aceptaron el guante, pero todo acabó sin resultado ya que se tenían tantas ganar que acabaron fuera la cuenta de diez del árbitro. En los otros dos combates de la noche, Aleister Black venció a Buddy Murphy en una durísima pelea y en el kickoff, Humberto Carillo volvió a derrotar a Andrade, quien de nuevo acabó enfadado con Zelina Vega.