Unai Caro vuelve a la acción en Ponferrada: "Soy más sabio"

El 2018 de Unai Caro fue frenético. El peleador de Sestao, de 27 años, ganó a Carlos Araya para proclamarse el mejor en superligero español en el muay thai. En octubre se proclamó campeón de Europa ISKA y en diciembre viajó a Japón a pelear por el Mundial. Dio la cara, puso en aprietos al campeón... pero no pudo regresar con el cinturón. El inicio de 2019 fue fulgurante, y en abril disputó otro mundial, en este caso con reglas de kickboxing. La suerte tampoco le acompañó, pero no se rindió. En julio se volvió a ver con Araya, al que ganó antes del límite. Había tenido una año muy intenso y tanto él como su equipo decidieron hacer un pequeño parón de competición. 

"Para mi fue un buen año y para me ha venido bien para relajar el cuerpo y la cabeza y así abrir una nueva etapa. Lo que nunca he parado es de entrenar. El año pasado me dio mucha experiencia y he podido analizar a dónde llegué y he podido aprender de los errores. Soy más sabio. He sacado en claro que tengo que aprovechar más mis cualidades, muchas veces me centro en otras cosas y no aprovecho tanto lo mio. Debo centrarme en lo que vale y no", asegura a AS. El descanso le "ha dado mucha motivación", y este sábado quiere demostrarlo en Ponferrada. Su promotor, Diego Vázquez, le ha buscado una dura prueba para retornar. 

Le espera el tailandés Klakunseuk Artir Iat, actual campeón del welter de Mix Muay Thai. "Cuando Diego me lo ofreció no dudé. Es un reto por el rival y también por estar en una categoría superior a la mía. Pelear contra un tailandés tiene su parte positiva y negativa. Son más contundentes, pero van con una marcha menos al estar acostumbrados a un ritmo más pausado, por lo que si estoy mentalizado y saco más ritmo es algo favorable. Si logro meter una marcha más, me favorecerá", asegura confiado. La jaula (esta vez Diego Vázquez organizará una velada en una jaula y no en un ring) le está esperando en Ponferrada. Unai Caro está de vuelta.