Tyson Fury y Braun Strowman llegan a las manos en Raw
El boxeador fue invitado a Raw tras el altercado que tuvo con Braun Strowman el pasado viernes en SmackDown. Fury y Strowman tuvieron que ser separados.
Parece que va en serio. Tyson Fury podría pasarse a la WWE de manera puntual. Eso es el pensamiento que se ha generalizado después de sus doble aparición en los shows semanales de la compañía. El boxeador británico fue invitado al estreno de SmackDown en Fox el pasado viernes. Mientras disfrutaba del show, Braun Strowman se encaró con él y le 'lanzó' a Dolph Ziggler, con quien mantenía una lucha. Eso encendió al 'Gypsy King', quien saltó al ringsite y tuvo que ser frenado por la seguridad del evento. La cosa no fue a más, pero la WWE invitó al excampeón mundial de los pesados al episodio de Raw para que pudiese dar sus explicaciones sobre lo ocurrido. Así, Fury fue el encargado de cerrar el show rojo este lunes. El boxeador aseguró en una entrevista previa antes de pisar el ring que buscaba una disculpa por parte de Strowman, ya que "él solo estaba viendo el evento y fue provocado".
El 'Monstruo entre Hombres' aseguró que lo haría si se lo pedía con respeto. Minutos más tarde, el 'Gypsy King' fue entrevistado por Jerry Lawler en el ring y fue interrumpido por Strowman. Ambos se enzarzaron en un cruce de palabras que acabó en un breve intercambio de golpes. Todo fue cortado por miembros de seguridad y luchadores de la WWE, aunque una vez separados hubo un segundo rifirrafe con el que concluyó el evento (una vez finalizada la retransmisión, Fury golpeó a Cesaro cuando este le intentó calmar). La incertidumbre es máxima, pero los rumores apuntan a que Fury y Strowman estaría preparando el camino para enfrentarse el 31 de octubre en el evento especial Crown Jewel que se disputará en Arabia Saudí. No sería la primera vez que un boxeador hace una intervención de este estilo en WWE, destacando a Mike Tyson y también a Floyd Mayweather, quien derrotó a Big Show en WrestleMania XXIV.
Fuera de la visita de Fury, quien peleó por última vez en septiembre y tiene previsto un enfrentamiento con Deontay Wilder por el Campeonato de los pesos pesados WBC en febrero (antes el estadounidense debe vender a Luis Ortiz el 23 de febrero), ocurrieron más cosas en Raw, aunque tras el controvertido final que tuvo la noche anterior Hell in a Cell ni Seth Rollins ni Bray Wyatt aparecieron en Raw. Sí lo hicieron las campeonas individuales de la WWE. Becky Lynch (campeona de Raw) y Charlotte Flair (campeona de SmackDown) formaron equipo contra las nuevas monarcas por parejas, The Kabuki Warriors (Asuka y Kairi Sane). Las japonesas lograron la victoria y al finalizar atacaron a Charlotte, que fue 'rescatada' por Alexa Bliss y Nikki Cross.
Mientras, The Vikings Raiders se ganaron una oportunidad por los títulos por parejas de Raw la próxima semana al derrotar en un combate a los actuales campeones, Dolph Ziggler y Robert Roode. Por su parte, Natalya y Lacey Evans tuvieron un nuevo enfrentamiento tras cruzarse en el kickoff de Hell in a Cell. Evans provocó antes del choque a Natalya, que acabó ganando un interesante duelo que tenía estipulaciones de 'la última mujer en pie'. Para empezar el show, Rusev vio como su todavía mujer, Lana, compartía momentos íntimos con Bobby Lashley, creciendo así la rivalidad entre ambos. Por último, Aleister Black reapareció pidiendo nuevamente un rival. Los Singh Brothers, a los que aplastó con facilidad. Ricochet derrotó a Apollo Crews y The O.C. hicieron lo mismo con Lucha House Party.