¿El último Open de Olazábal?
El vasco, en su último año de exención en el European Tour, no cerró la puerta del todo a volver a jugarlo, pero aseguró que será sólo si le "invitan" y está jugando "bien".
En febrero José María Olazábal cumplió 53 años y la gasolina se le va acabando al genio de Fuenterrabía. Con 29 victorias en su haber, entre ellas dos Masters de Augusta, y siete Ryder Cup jugadas con un balance de cuatro triunfos (a los que se añade otro como capitán en el 'Milagro de Medinah' de 2012), Chema afronta últimamente muchas despedidas, como la que protagonizó hace dos semanas en Wentworth.
Y este viernes tuvo otra, aunque esta a medias. Tras fallar el corte en el Open de España por siete golpes (cerró en +7 con la criba en el par), el vasco confirmó lo apuntado el lunes en la presentación de los nueve hoyos que remodelará su empresa en el Club de Campo, sede del torneo, siguiendo un diseño original de Seve Ballesteros, su íntimo amigo. Que puede que no vuelva a jugar el tercer Abierto más antiguo de Europa (tras el británico y el francés) nunca más.
Olazábal tiene tarjeta del Circuito Europeo desde 1986, pero este año se le acaban las exenciones que se otorgan por diferentes motivos y por los que seguía manteniendo su estatus pese a que los resultados hace tiempo que no le acompañan. A partir de ahora, aseguró, se centrará en el Champions Tour de veteranos del PGA, y sólo volverá al Open invitado. "Si juego bien y llamo la atención de quien se encarga de las invitaciones pues igual no es el último", fueron sus palabras. Le queda "la manchita" de no haber podido ganar el torneo en ninguna de sus 25 apariciones. "Cambiaría por él casi cualquiera de los otros que he ganado", dijo.