Carro: “Lo importante es mantener el hambre viva”
El madrileño llega a los Mundiales de Doha, que arrancan este viernes, con la cuarta marca mundial en 3.000 obstáculos. Su entrenador: "Ha encontrado un equilibrio".
La última vuelta del entrenamiento de Fernando Carro reúne a 20 atletas que aplauden de manera espontánea al de Canillejas al pasar su última valla en Madrid, antes de partir para Doha. En Qatar arrancan mañana los Mundiales y él se enfrentará desde el martes a los 3.000 obstáculos, la prueba que dominan kenianos, etíopes y un marroquí (El Bakkali) en una fiesta en la que se ha colado Carro: “¿Ve cómo mis compañeros me animan y me ayudan en las series? A ellos les debo esto ”.
Carro ha estallado esta temporada con el récord de España (8:05.69 en Mónaco) y la cuarta marca mundial, pero el comienzo formal de su camino a la élite llegó en 2010 cuando se incorporó al grupo de Arturo Martín. “¡Me ha quitado años de vida!”, bromea el míster: “Sigue siendo caótico, pero al final en la vida se trata de tener equilibrio deportivo, personal y él ahora, a los 27, lo ha conseguido. Todo ha sido con mucho tiempo de trabajo”.
Se explica Carro, que acaba de terminar un 800 con vallas en 2:00: “Cuando llegué con el entrenador me quería comer el mundo, porque veía en el grupo a Arturo Casado y aspiraba a ser como él. Luego pasé una etapa difícil en la que no veía el horizonte y después recuperé el hambre. La clave es el hambre, mantenerla viva. En la vida y en carrera”. Y para seguir en forma ha mantenido el trabajo de fondo y kilómetros.
¿Y entonces en Doha qué espera? “Va a ser plata o plomo. No hay otra”, explica el obstaculista, que reconoce que en la final de la Diamond League los africanos ya le miraban “de otra manera”. “Si es que no están tan lejos. El récord le hace ver que está ahí. Luego hay que ver qué pasa. Si tienen un mal día...”, dice Martín, que se pone de objetivo un top-8: “Bien está, luego hay golpes, nervios...”.
Un paso en su autoestima fue la medalla de plata europea de 2018. Y hace poco le preguntó a Casado: “¡Qué edad tenías cuando fuiste oro europeo de 1.500?”. Casado respondió: “27”. Y Carro se dijo: “Mi edad, es mi momento, y luego Tokio”.
Tras las series y despedirse de todos sus compañeros, Carro se puso su camiseta de Oakland Raiders en INEF, comió con su novia Clara y fue al fisio. Hoy aterriza en Doha, donde mañana empieza la acción.