Gallagher y Venom Page, cabezas de cartel de Bellator en Dublin
James Gallagher y Michael 'Venom' Page ocupan los combates estelares del Bellator Dublin este viernes. Page llega tras su primera derrota como profesional.
La cita de Bellator con Dublin (la última fue en febrero) comienza a ser habitual. En Irlanda las MMA se viven con gran pasión y cada vez son más luchadores del país, y también de Reino Unido, que despuntan. Este viernes, la compañía visita de nuevo la ciudad que vio nacer a Conor McGregor y tiene, precisamente, a un peleador que salió de su gimnasio en la misma velada. James Gallagher vivirá su segundo estelar en la ciudad en la que se hizo luchador. Viene de una racha de dos triunfos consecutivos, pero debe seguir refrendando que su primera derrotar profesional ante Ricky Bandejas en agosto de 2018 fue solo una mala noche.
Gallagher, de 22 años, tiene una historia digna de mención, y es que con 13 años peleaba con hombres. Su relación con John Kavanagh (jefe del gimnasio SBG de Dublín y entrenador de McGregor) le cambió la vida y le puso en la dirección correcta. Tiene mucha calidad y en el suelo es letal. Este viernes se enfrenta a un nombre muy experimentado como Román Salazar (tiene 21 peleas profesionales por 10 de Gallagher), El estadounidense es un ex de UFC y se presenta con ganas de redención. Ha perdido sus tres últimos combates. Parece un duelo fácil para Gallagher, a quien están mimando para que vuelva a situarse en las posiciones top de su división en Bellator. Es muy favorito y debe refrendarlo.
En una situación similar (en cuanto a favoritismo) está Michael 'Venom' Page. El inglés, de 32 años, parecía invencible hasta el pasado mayo, cuando en las semifinales del torneo del peso welter de Bellator Douglas Lima le noqueó. Fue una sorpresa y tras estar invicto en 14 peleas debe retomar su camino... aunque Bellator se lo ha puesto demasiado fácil. Se cruza con Richard Kiely, quien tiene un bagaje de 3 victorias y 1 derrota. Muy desigualado. El irlandés tiene todas sus victorias por KO, por lo que pese a la diferencia de experiencia, saldrá a por la oportunidad de su vida. Si gana su carrera cambiará por completo, pero en condiciones normales debería ser una pelea de rodaje. Dos estrellas y dos favoritos claros, pero en MMA todo puede ocurrir. Dublín espera.