Fury firma con Top Rank y la revancha con Wilder se complica
El británico cerró un contrato por cinco peleas y algo más de 90 millones de euros. Sus derechos de televisión en Estados Unidos son de ESPN, un escollo más.
El combate que más cerca parecía que se iba a cerrar en los pesos pesados es el que más complicado se ha vuelto. Wilder y Fury realizaron un polémico nulo el 1 de diciembre. El WBC, organismo que reguló la pelea, nombró una revancha inmediata y los dos dijeron que querían resolver sus diferencias pronto. Todo parecía encaminado y aunque Joshua intentó convencer a Fury, acabó tomando otro camino la semana pasada (debutará en Estados Unidos en junio). Así, estadounidense y británico parecían condenados a entenderse, pero Fury fue el que se sacó un as de la manga este lunes.
El púgil de Manchester, que había debuto en Estados Unidos ante Wilder, firmó un contrato de co-promoción con Top Rank (empresa de Bob Arum). Cerró cinco peleas por 80 millones de libras (91 millones de dólares) y sus derechos televisivos en Estados Unidos pertenecen a ESPN. Ahí está uno de los principales escollos de la revancha, pues Wilder tiene un contrato firmado con Showtime. Tras el anuncio de Fury, sus nuevos manejadores catalogaron la secuela como "muy difícil", aunque desde el lado del campeón dicen que "es posible". Todo pasaría porque ambas televisiones diesen el evento de manera simultánea. Es posible, y no es la primera vez que se hace, pero todo demorará aún más la pelea.
En esa misma línea, su nuevo contrato también podría poner en complicaciones una pelea contra Joshua, pues los derechos del campeón británico pertenecen a DAZN. Por otro lado, habrá que ver los planes que tienen Frank Warren (promotor en solitario de Fury hasta este lunes), el púgil y Top Rank, pues con un contrato de cinco peleas firmado quizá no quieran 'quemar' las balas tan pronto, pues una posible derrota de Fury le devaluaría en el mercado. Muchas piezas en el tablero de ajedrez se deben mover, y de nuevo quien paga las consecuencias, el aficionado que lleva tres meses esperando la fecha de una revancha que se complica.