La defensa del Bidasoa le lleva a la final de la Copa Asobal
En la segunda mitad el Granollers no pudo con la agresividad rocosa del equipo vasco, que se impuso en toda regla en la semifinal
El Bidasoa, un clásico del balonmano español, venido a menos con el paso del tiempo, en Lleida regresa a los inicios de la Copa Asobal, y un cuarto de sigo después regresa a una final: jugó dos a primeros de los noventa, y ganó una. Ahora vuelve, y no de manera sorprendente porque ha terminado la primera vuelta como segundo en la Liga, y ante el Granollers defendió esa condición de serie para ganar 30-25 (14-15).
El triunfo irundarra se basó en su defensa, que poco a poco se hizo la dueña del partido, aunque en la primera mitad le costase encontrar la manera de frenar a Figueras, que aparecía por cualquier sitio de los seis metros. Cuando el pivote quedó controlado, el Granollers se quedó sin fuelle, reducido a los tantos de Gassama desde el extremo, porque los laterales estaban controlados por el muro y por Rangel en la portería.
En la segunda parte corrió el Bidasoa, golpeó una y otra vez, y Terrafeta y Lancina desaparecieron en la dirección del Granollers. El 6-0 fuerte, duro, rocoso, del equipo de Jacobo Cuetara fue fiel al estilo de los viejos tiempos