Daniel Cormier da una cátedra en el Madison Square Garden
El estadounidense retuvo el campeonato del peso pesado al someter en dos asaltos a Derrick Lewis en el combate estelar del UFC 230. No le dio ninguna opción.
Cátredra de Daniel Cormier. Sólo así se puede definir la exhibición que el campeón del peso pesado de la UFC dio en el UFC 230. El estadounidense llegó al Madison Square Garden de Nueva York con la intención de ampliar su legado... y vaya si lo hizo. En julio logró ser el segundo luchador, tras McGregor, en reinar en dos categorías de manera simultánea y en menos de cuatro meses se ha convertido en el primero en defender sus coronas de manera exitosa. En el Garden no sólo ganó, también maravilló. Sometió en dos asaltos a Derrick Lewis, que poco pudo hacer ante el poderío de DC. Después le tocó hablar y dejó clara su próxima parada: Brock Lesnar. "Cuando vengas trae ese cinturón de WWE que acabas de ganar, que también me siento un campeón de WWE", espetó. La pelea está en el horno.
Antes de Lesnar, Cormier se enfrentaba a un duro reto. La pegada de Lewis era clara, pero ya había aplacado la de Miocic. Debía jugar con la envergadura. Lewis salió a mantener la distancia con sus piernas. Sólo soltó dos patadas, ahí se terminó su pelea. Cormier le tiró al suelo y comenzó a trabajarle. Restando oxígeno y con golpes al rostro. Trabajo de destrucción. En el segundo asalto Lewis intentó llegar con sus manos y DC le enseñó a esquiva golpes. Debía arriesgar para entrar en distancia, lo hacía, pero con un ballesteo y una rápida salida los evitaba todo. Lewis lo tenía crudo.
Repitió la ecuación Cormier. Enganchó a su rival por una pierna y le lanzó al suelo. No tardó ni un segundo en castigarle, pero Lewis quería irse. Le retuvo y le lanzó al suelo dos veces más. Con la última le ganó la espalda y terminó el combate. 'Mataleón' a un rival que le sacaba 13 centímetros. Simplemente espectacular. Le sobraron 2 minutos y 55 segundos del segundo round para hacer historia. Acabó la pelea sin llevarse un golpe. Cátedra en la catedral.
Souza acabó con Weidman con una genialidad
Ronaldo Souza vuelve a mirar al título del peso medio de cerca. El brasileño noqueó en el tercer asalto de su combate en el UFC 230 a Chris Weidman. Jacaré tenía perdida la pelea. El estadounidense dominó con su jab y supo moverse bien para pegar y que no le pegasen. Tenía todo de su lado, pero Souza apretó en la parte final. Se fue con todo y aunque Weidman iba trabajando bien, decidió quedarse plantado contra la jaula y cruzar. El no llegó a impactar, pero sí su rival. Souza metió su mano por la zona superior de la cabeza de Weidman, un golpe de los que desconecta de inmediato. Así fue. Iba perdiendo, pero los genios tienen esas facilidades. Con una mano Jacaré se acerca al título.