El Ademar resurge ante el Wisla en el momento justo
La victoria ante el equipo polaco, que hasta ahora era el único invicto del grupo, recoloca al equipo leonés con opciones de pelear en la Champions
El técnico del Abanca Ademar, Rafa Guijosa, pedía antes de recibir al líder invicto del grupo de Liga de Campeones dos virtudes a su equipo, magia y épica, y sus jugadores añadieron el condimento de gran juego para reponerse a las bajas y a un estado anímico delicado tras dos derrotas para sumar un triunfo de mucho prestigio en Europa ante Orlen Wisla Plock (27-24). Los leoneses se meten de lleno en sus opciones de aspirar a las dos primeras plazas del grupo y demuestran el orgullo de un equipo capaz de reinventarse ante las adversidades.
El estudio del rival lo puso de manifiesto desde el primer instante el guardameta Nacho Biosca que en una arranque de partido pletórico tocó todos los balones esperando siempre en el lugar exacto los lanzamientos sin duda en un gran trabajo defensivo, respaldado por su habitual estudio del vídeo sobre las características de los rivales.
El apagón ofensivo polaco contrastó con la frescura de ideas y la variedad de un Ademar, quizá enrabietado después de su inesperada derrota liguera ante el Teucro, permitieron un 3-0 de salida que obligó a un tiempo muerto a Xavi Sabaté que vio como su equipo estrenaba el marcador cerca del minuto 7.
Entonces ya se habían fijado las bases de una defensa de ayudas dirigida por la batuta experta de Carou que dirigía a su antojo a sus compañeros en el 6-0 infranqueable para un Wisla Plock que buscaba y buscaba soluciones en su profundo banquillo pero sin encontrar la fórmula.
Ni tan siquiera cuando empezaron las rotaciones Ademar lo notó, todo lo contrario, mantuvo e incrementó la diferencia pese a la defensa abierta y más expeditiva por momentos de su rival que nunca pudo sujetar el brazo de Ivan Mosic en la mejor versión hasta ahora en la temporada del lanzador balcánico que puso el 15-9 al descanso.
La salida tras el descanso mostró a un equipo polaco transformado, muy suelto en ataque y sabiendo leer perfectamente la defensa local y apurando al máximo al ataque ademarista que llegó en varias ocasiones al borde del pasivo.
El atasco leonés ante una defensa más intensa, unido a que su rival anotó los mismos goles en medio periodo que en toda la primera parte, obligó a Rafa Guijosa a parar el partido cuando ya notaba su equipo el aliento del rival (19-17, minuto 43).
El brasileño exGranollers Guillehme De Toledo sacó su "fusil" y Tarabochia dio la primera igualada a su equipo (21-21) a poco más de diez minutos para el final, ya con Slavic en el marco ademarista.
Lejos de arredrarse, respondió Ademar con su mejor espíritu para anotar un parcial de 4-0 después de recuperar su solidez defensiva, también amparada en el acierto del guardameta croata y encontrar la magia que había pedido antes del encuentro Guijosa de Acacio Marqués para sentenciar.